El simulacro de accidente aéreo que se hizo ayer en las inmediaciones del aeropuerto de San Pablo no contó con los Bomberos del Ayuntamiento de Sevilla. Los efectivos antiincendios que participaron en este evento fueron los propios del aeropuerto y los del parque de La Rinconada. A diferencia de los del Ayuntamiento de la capital, que son profesionales, los del parque de La Rinconada son bomberos voluntarios adscritos a la Diputación Provincial. A los de la capital, pese a que parte de los terrenos del aeródromo están ubicados en su término municipal, ni siquiera se les informó.

Así lo denunciaron ayer a este periódico fuentes del Sindicato Andaluz de Bomberos (SAB). "El simulacro de accidente aéreo realizado en los exteriores del aeropuerto para comprobar la efectividad del análisis de riesgo del Plan Territorial de Emergencias de Andalucía parte de base, antes de comenzar, con un grave error, al delimitar con una raya las competencias territoriales y no pensar en la efectividad de la actuación, que repercute directamente en salvar vidas y bienes materiales", apuntaron las fuentes. El simulacro fue organizado por la delegación del Gobierno de la Junta en Sevilla, en colaboración con Aena.

Los representantes del SAB añadieron que "estas situaciones se dan continuamente, obviando los recursos que tiene el Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Sevilla". El sindicato recordó el incendio ocurrido en un polígono industrial de Santiponce el pasado 24 de noviembre, en el que ardieron doce naves. "A ese incendio no acudimos pese a que el parque de Pino Montano está a escasos minutos y habríamos llegado con rapidez. Pero aquel incendio no era competencia nuestra según los protocolos del servicio de emergencias 112".

Los Bomberos de Sevilla lamentan que la Junta continúe con esta actitud y obvie los recursos de la capital, que tiene "dos parques a escasos cinco minutos del aeropuerto, como son el de Pino Montano y el del polígono Carretera Amarilla". "Si de lo que se trata es de ser efectivos y salvar vidas, el tiempo de respuesta es fundamental y no entendemos cómo no cuentan con la cercanía y el potencial del Cuerpo de Bomberos de Sevilla", lamentaron los representantes del SAB.

El simulacro consistió en un accidente aéreo en la denominada zona E, es decir, la zona exterior que abarca una circunferencia de ocho kilómetros de radio, tomando como epicentro el aeródromo. El ejercicio simuló el siniestro de una aeronave Challenger 601 en esta zona externa del aeropuerto, con el resultado de cinco víctimas mortales, dos heridos y un piloto ileso, así como daños estructurales y un incendio en el avión.

La Junta activó el plan de emergencias interior del aeropuerto y el plan territorial de emergencias de Andalucía. En la intervención participaron, además de los bomberos voluntarios de la Rinconada, el 112, Protección Civil, el Grupo de Emergencias de Andalucía, la Guardia Civil, la Policía Nacional, la Policía Autonómica, la Policía Local, los servicios de emergencias sanitarias y el personal del instituto de Medicina legal, entre otros servicios. El simulacro comenzó a las once y concluyó una hora y media más tarde.