La Junta de Facultad de Medicina decidió ayer, con 45 votos a favor, 33 en contra y tres abstenciones, la ubicación del edificio que albergará las nuevas aulas de Medicina en Sevilla: el campus Macarena. Tras una reunión mantenida ayer, el máximo órgano de decisión de la Facultad de Medicina, en el que están representados los distintos departamentos,  se decantó por su localización histórica, junto al Hospital Universitario Virgen Macarena, tras varios años de discusión. El rector de la Universidad de Sevilla decidió que fuera la propia Facultad de Medicina la que eligiera el campus para su nueva sede.

Durante los últimos años se han barajado dos posibles ubicaciones para la construcción de la nueva sede universitaria de Medicina: el campus Macarena o el campus del Hospital Virgen del Rocío.Una comisión técnica, que se constituyó hace años entre la Universidad de Sevilla, la Gerencia de Urbanismo y el Servicio  Andaluz de Salud, estudió  las distintas posibilidades para crear la nueva sede universitaria e incluso  buscó un solar en las inmediaciones de los tres hospitales universitarios (Valme, Virgen del Rocío y Macarena). 

La discusión se ha mantenido los últimos años centrada en los espacios libres en el entorno del Virgen del Rocío y del Virgen Macaerna.  Uno de los espacios que se han barajado estos últimos años es un solar en las cercanías del Hospital Virgen del Rocío, en concreto, un espacio con calificación de educativo, al otro lado de la vía del tren. No obstante, la Junta de la Facultad ha decidido definitivamente la construcción del nuevo edificio en el campus Macarena. 

Las instalaciones de la  Facultad de Medicina de Sevilla, institución que celebró su centenario el pasado año, se han quedado obsoletas. Un informe  ya advirtió hace  una década de las necesidades de ampliar y modernizar esta sede universitaria para adaptarla a las exigencias europeas y al número de alumnos. Según un plan de necesidades elaborado en la Facultad de Medicina,  hace  casi una década, el edificio debería tener 26.358 metros cuadrados, y éstos se dividirían entre los 7.877 destinados al módulo docente, los 975 para las instalaciones del Decanato y servicios administrativos, los 2.250 de los servicios generales,  y los 7.249 reservados a los departamentos. 

El mencionado plan de necesidades de la Facultad de Medicina  recogía, ya en 2009, la existencia de 17 aulas con capacidad para 100 alumnos cada una, 20 aulas-seminarios, una sala de demostraciones clínicas, laboratorios para prácticas, sala de estudio, una aula magna, aula de informática y biblioteca. Estas instalaciones se completarían con los pabellones docentes con los que cuenta la Facultad de Medicina en los hospitales universitarios.