Los vecinos de Los Pajaritos se sienten víctimas de un "cóctel explosivo"

Los vecinos de Los Pajaritos dicen sentirse víctimas del "cóctel explosivo" formado por la falta de recursos, la degradación del entorno urbano, las deficiencias educativas y el tráfico de drogas. Esta situación es la que crea, sostienen, sucesos como el del pasado domingo. Un hombre permanece en estado crítico después de haber sido apuñalado en el cuello con una botella de vidrio rota, tras intentar mediar en una pelea entre dos mujeres que tenía lugar en la calle Galaxia. Los amigos de la víctima apalearon después a la presunta agresora, que también fue hospitalizada.

Este incidente, añaden los residentes, "supone un eslabón más de la cadena de acontecimientos de esta índole que, con demasiada frecuencia, salpican la natural convivencia" del barrio. Es, además, "síntoma y consecuencia de la marginación que sufren las zonas desfavorecidas" de Sevilla. Así lo manifestó ayer la plataforma cívica Tres Barrios-Amate en un comunicado remitido a este periódico. La entidad lamenta "un suceso de tan dramáticas consecuencias" y desea la pronta recuperación de los heridos.

La plataforma relaciona esta trifulca con la macrobotellona que diariamente congrega en el lugar de los hechos, en la calle Galaxia y en la plaza del doctor Andreu Urra, "a una muchedumbre con una música atronadora y consumo descontrolado de alcohol y otras sustancias". Esto deja al día siguiente "un paisaje desolador de mugre, desperdicios y cristales rotos".

Dichas aglomeraciones comenzaron tras la pandemia del covid-19. Los vecinos recuerdan que han sido denunciadas reiteradamente ante la delegación de Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Sevilla y la Subdelegación del Gobierno. "Lamentablemente, tenemos que decir que el delegado de Seguridad del Ayuntamiento ni siquiera se ha dignado a respondernos. Es más, hemos recurrido a la mediación del Defensor del Pueblo, sin que ningún representante de la delegación haya hecho acto de presencia". La entidad vecinal destaca que es precisamente la Policía Local la que tiene competencia directa sobre materias como la botellona.

Los residentes de Los Pajaritos, Madre de Dios, la Candelaria y Amate aclarar que "este tipo de hechos no representa a la inmensa mayoría del vecindario, que es la primera víctima tanto de la botellona nocturna como del resto de incidentes que torpedean la buena convivencia que tratamos de construir entre todos". Una vez más, recuerdan que, ante la presión ejercida por tantas carencias socioeconómicas, "la ciudadanía no puede salir por sí misma de la situación de exclusión en la que se encuentra". "Es necesaria la intervención firme y decidida de las autoridades, a las que se les llena la boca prometiendo impulsar a las barriadas desfavorecidas de Sevilla para nada hacer cuando llega la hora de tomar decisiones reales y efectivas".