Rayo Vallecano-Sevilla | La crónica

Un punto con un solo central tiene cierto valor para este Sevilla (1-1)

  • Alex Telles hizo de zaguero zurdo y era el que se emparejaba con Lejeune en el córner que significó el empate con un remate del defensa del Rayo en solitario

  • Suso, en un rebote, había adelantado a los sevillistas para tener el marcador a favor hasta el minuto 65

  • El directo del Rayo Vallecano-Sevilla

Lejeune cabecea en solitario delante de Alex Telles el gol del empate rayista.

Lejeune cabecea en solitario delante de Alex Telles el gol del empate rayista. / Chema Moya | Efe

Un punto para el Sevilla en su visita a Vallecas. En la teoría, debería ser un botín insatisfactorio dado que se enfrentaban el cuarto presupuesto de la Liga española con uno de los clubes más pobres en ese aspecto económico. En la práctica, en cambio, jugaba en la barriada madrileña una de las escuadras que luchan por escapar de los puestos de descenso contra otra que coquetea con los puestos que dan derecho a participar la próxima campaña en las competiciones europeas. Es la cruda realidad de la entidad nervionense, que para más inri y gracias a su maravillosa planificación, con toda la ironía del mundo lógicamente, se subía al AVE con un solo defensa central específico cuando su entrenador se está manejando con tres en casi todos los litigios. Alex Telles era el que estaba marcando a Lejeune en la jugada del empate y el francés remató más solo que la una.

En definitiva, el balance es el típico sí pero no, la botella medio llena o medio vacía, aunque en este caso, por el sinfín de circunstancias que rodean a este Sevilla, cabe mirarla desde el plano positivo y, por tanto, festejar el punto acumulado en la tabla clasificatoria. Porque el Rayo Vallecano es, a día de hoy, nueve puntos mejor que los nervionenses y eso le otorga valor a que éstos no cayeran derrotados en su condición de visitantes.

Pero el fútbol no se reduce únicamente a esos números y tiene mucho que ver también con las sensaciones, con el hecho de que el Sevilla tenía una gran oportunidad para acercarse a unos puestos más dignos en esa clasificación y, por tanto, a poder luchar por reintegrarse en la pelea por los puestos que, aunque sea de rebote, le podrían dar la posibilidad de estar de nuevo en esas competiciones continentales. Y lo pudo conseguir gracias a diferentes tramos de buen juego, de dominar incluso la situación, de ponerse incluso por delante gracias a una carambola en un disparo de Suso que desvió Óscar Valentín, pero al final tampoco le da para tanto y se topa con esa realidad de que Alex Telles sea el central que marca a otro zaguero mucho más fuerte como Lejeune. Gol sin ninguna oposición, uno a uno y hasta cabe darle las gracias al ser todopoderoso por haber sumado al menos.

Sampaoli acudió a Vallecas con la ausencia de Badé por una lesión muscular, lo que, unido a la eterna ausencia de Marcao, lo dejaba con un solo defensa central específico, Nianzou. El resto es un parche detrás de otro. Con Fernando ahí lo que se gana en ese aspecto se pierde muchísimo por no tenerlo como medio centro y ahí están los experimentos del segundo periodo, con Montiel y con Acuña como medios centro, para demostrar que es una verdadera atrocidad verlo ahí. Llevado a la exageración más desproporcionada, como si Argentina hubiera acudido al Mundial con un solo portero y Messi hubiera tenido que jugar ahí la mayor parte de los partidos. Sí, Fernando, cada vez que juega de medio centro, elevaba el nivel del resto del equipo y esta vez hizo el ridículo en esa posición Montiel durante un buen rato y después tuvo unos minutos, algo más productivos, Acuña, aunque sin acercarse a la trascendencia del brasileño.

Nianzou cae derribado ante Trejo Nianzou cae derribado ante Trejo

Nianzou cae derribado ante Trejo / EFE

Es una consecuencia más de las planificaciones, de esos movimientos de fichas que tienen lugar con alergia a la contratación de centrales. Tres al comienzo de la temporada y dos de ellos eternamente en la enfermería, porque Marcao casi ni ha debutado y Rekik cae a los dos partidos, más o menos, de volver a la titularidad. Pues nada, con los jóvenes José Ángel y Kike Salas cedidos y ni siquiera esa opción de parchear, todos al AVE con Nianzou como único central disponible, ya que Gudelj, otro remiendo, también estaba sancionado y Alex Telles era quien hacía de central zurdo en su reaparición tras estar de baja desde el Mundial. El brasileño no lo hizo mal en líneas generales, pero se olvidó de su papel de lapa en un córner y permitió el remate en solitario de Lejeune.

Hasta ahí el Sevilla, poco después de la hora de juego, estaba por delante en el marcador después de haber protagonizado un partido serio y con valentía a la hora de salir a buscar a este pujante Rayo. Pudo marcar Camello no más comenzar en una acción en la que el atacante local le mostró la matrícula a Fernando en velocidad, pero el brasileño tuvo la picardía del oficio para desequilibrarlo ligeramente en el momento del remate. Bono se encargó del resto con su parada.

El Sevilla trataba de reproducir su estilo de juego habitual, de tomar riesgos atrás para salir con el balón controlado, pero eso se topaba con la decisión de Iraola de no ir a presionar al guardameta nacido en Canadá. Eso imposibilitaba las combinaciones, ni siquiera corriendo riesgos, y la mayoría de las veces la solución era el pelotazo en busca de Ocampos y Rafa Mir, que hacían de pareja de delanteros en un equipo con riqueza táctica en el movimiento continuo de las piezas para no estar atornilladas a un puesto fijo.

Cuando la pelota se dirigía al argentino, el Sevilla tenía un porcentaje elevado de quedársela en zonas más adelantadas; cuando iba hacia Rafa Mir el índice de probabilidades era prácticamente cero y de ahí la sustitución del futbolista en el intermedio pese a que los hombres de negro tenían un gol de ventaja. El gigante cartagenero era una auténtica nulidad y Sampaoli buscó otras soluciones con Jesús Navas en el lateral y Montiel por el medio. El resultado también fue insatisfactorio, porque lo que no puede ser no puede ser y, además, es imposible.

El Sevilla, que pudo golpear más fuerte en un remate de cabeza de Montiel con todo a favor en una falta de Suso (36’), tenía que sufrir tras el intermedio. Camello pudo empatar en una ocasión clarísima (55’), pero el sufrimiento de los sevillistas no fue excesivo hasta que Lejeune cabeceó con todas las facilidades del mundo (65’). Sampaoli trató de reaccionar, introdujo a En-Nesyri por Ocampos, metió antes a Bryan Gil y la realidad es que hubo un par de tiros ligeramente desviados de Bryan Gil (68’) y de Gueye (86’) antes de un gol anulado a En-Nesyri por el pelillo de una gamba (89’) y porque hay que creer a las líneas del VAR como dogma de fe. También le anularon otro a continuación a Raúl de Tomás aunque éste estaba varios cuerpos adelantados e incluso dio la sensación de que si no toca el balón pudo ser tanto de Falcao.

Uno a uno en Vallecas, en definitiva, entre un equipo aspirante a jugar las competiciones europeas y otro que lucha por alejarse de la quema. Que cada uno se quede con la sensación que proceda a sus pensamientos, pero siempre que se tenga en cuenta que Alex Telles era el central que defendía a Lejeune en el córner sencillamente porque no hay otro…

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios