La selección de Marruecos está desde este martes en Kinsasa, donde este viernes juega el partido de ida de la eliminatoria para el Mundial de Qatar, a las 16:00. La llegada de la selección alauita a la capital congoleña ha estado mediatizada por cierto caos organizativo, según la prensa marroquí, que denuncia que el equipo nacional tuvo que suspender el entrenamiento de la tarde del miércoles por la presencia de hinchas locales.

Fue apenas unos minutos, hasta que los aficionados del Congo desalojaron el Estadio de los Mártires, un gran recinto, de césped artificial, en el que se habían colado decenas de hinchas para seguir las evoluciones del rival, o quién sabe para qué.

🚨 Des supporters de la RDC 🇨🇩 se sont introduis dans le stade lors de la séance d’entraînement du Maroc. La séance a dû être interrompue plusieurs minutes ![@arryadiatv] pic.twitter.com/JriUDhuNvV

— Hanif Ben Berkane (@HanifBerkane) March 23, 2022

Lo cierto es que el cuerpo técnico que dirige Vahid Halilhodzic instó a la seguridad del Congo y a los propios hinchas a que abandonasen el estadio, antes de proseguir con el entrenamiento.

La Real Federación de Fútbol de Marruecos (RFFM), por otra parte, ha trasladado a la prensa marroquí que tenga tranquilidad con el concurso de Bono, dado que el portero del Sevilla está en condiciones de jugar la crucial eliminatoria.

Había cierta inquietud entre la prensa y la afición marroquíes sobre el estado de Bono, después de que éste se tuviera que retirar del calentamiento del partido ante la Real Sociedad al sufrir unas molestias.

El jugador viajó el lunes hacia Marruecos junto a Munir y En-Nesyri. Y ya el martes aterrizó en Kinsasa con el resto de la expedición alauita, para iniciar la prepararción del partido. El único futbolista que está ejercitándose aparte, según la RFFM, es Ez Abde, Ezzalzouli, el joven delantero del filial del Barcelona.