El Real Madrid comenzó a preparar el partido ante el Sevilla de este sábado en la tarde de este martes después de una jornada de descanso tras ganar en Arabia Saudí la Supercopa de España. Hay dos futbolistas que centran el foco por su estado físico y ambos estuvieron en la Ciudad Real Madrid, aunque no con sus compañeros.

Sergio Ramos es el que más complicado tiene llegar a la cita de este sábado ante su ex equipo, debido a que sufrió un esguince de tobillo en la final de la Supercopa, tras una mala caída en un salto con Morata. En la vuelta a los entrenamientos de los merengues hizo ejercicios en el gimnasio, junto a a Luka Jovic trabajaron en el interior de las instalaciones. YBenzema tampoco lo tiene fácil, ya que arrastra una lesión muscular en la pierna derecha.

El delantero francés, artífice del 0-1 en el encuentro de la primera vuelta, se perdió la cita de Arabia. En el regreso al trabajo del Madrid, Benzema sí hizo trabajo de césped y empezó a tocar el balón, parcialmente, aunque lo hizo al margen de sus compañeros, con tres días por delante aún para progresar en su proceso de recuperación y comprobar si su evolución le permitirá reaparecer ante el Sevilla. Es la principal incógnita en el ataque de Zinedine Zidane.

En cambio, Bale, otro que se perdió la Supercopa, sí se ejercitó a pleno rendimiento con el resto de los compañeros. El galés no viajó a Arabia Saudí por una infección en el tracto respiratorio superior, ya superada, por lo que su concurso dependerá de lo que decida el técnico francés. Sí son bajas seguras Marco Asensio y Hazard.