Sevilla FC

Un refuerzo moral... y una distracción mental

  • El triunfo ante el Barça reanima a un Sevilla que ha de repartir esfuerzos, con sólo 18 futbolistas sanos, entre la vuelta copera y el Levante, sin margen de error

  • Jesús Navas se unió a la nómina de la enfermería y Machín debe buscarle el sustituto más adecuado para reaccionar ya en la Liga: 7 puntos de los últimos 21

Pablo Machín, junto a uno de sus ayudantes, el analista Carlos Martínez.

Pablo Machín, junto a uno de sus ayudantes, el analista Carlos Martínez. / Víctor Rodríguez

El triunfo del Sevilla sobre el Barcelona fue revitalizador, supuso una inyección de moral y energía... y también supone un importante foco de distracción. Pablo Machín debe hacer una buena labor de gestión en varios sentidos. En primer lugar, el reparto de esfuerzos entre los dos inminentes partidos, el del Levante este sábado y el del miércoles en la Copa. En segundo lugar, la definición de un once titular y una convocatoria en función del estado de forma de los futbolistas que tiene disponibles, algunos tocados, como Sarabia y Escudero, y otros que vuelven tras haber sido baja, como Roque Mesa y Aleix Vidal. Y en tercer lugar, la mentalización de su equipo de que el partido más importante es el inmediato. Será difícil borrar del inconsciente de los jugadores que a la vuelta de la esquina está la posibilidad de eliminar al Barcelona y de meterse en unas semifinales de la Copa del Rey.

El partido de vuelta en el Camp Nou será un reto de altísimo nivel que afrontará el Sevilla con una ventaja que sería ideal ante cualquier rival del mundo, casi una garantía del pase si no estuviera enfrente el Barcelona de Messi. Ese 2-0 ejerció de factor revitalizador para un equipo que había encadenado tres derrotas seguidas, y sin gol, dos a domicilio en la Liga en escenarios poco propicios, San Mamés y el Bernabéu, y otra inocua en la Copa. Y con las derrotas llega la desconfianza. De ahí la importancia del triunfo sobre el líder de la Liga, por mucho que Ernesto Valverde sacara en el Ramón Sánchez-Pizjuán un equipo alternativo al de gala. Pero también aparece ese 2-0 como un elemento de perniciosa distracción si el entrenador no lo maneja bien.

Ante el Barcelona volvió a aparecer el Sevilla más reconocible... con el pago de otra lesión. Jesús Navas se sumó a la lista, ampliada esta misma semana por Munir y Gnagnon, los dos con problemas musculares igual que el palaciego. Así, Pablo Machín sólo tendrá disponibles a 18 futbolistas sanos. A los tres jugadores con dolencias musculares, con la de Jesús Navas aún por determinar, hay que sumar los dos con lesiones de larga duración, Gonalons y Nolito. Y con esos 18 futbolistas debe contar Machín para el doble reto de reaccionar en la Liga y de aguantar el tipo en el Camp Nou, aunque podría sumarse al canterano Bryan, al que ya casi cuenta como uno más de la primera plantilla, pese a que es un juvenil.

El Sevilla ha ido perdiendo su colchón de puntos en la Liga, incluso cedió en el Bernabéu el tercer puesto. Y ahora le toca defender con uñas y dientes, con toda su concentración y tensión, ese cuarto puesto al que aspiran otros equipos que han ido recortando distancias por detrás. Porque el Sevilla de Pablo Machín, por el calendario, con más partidos a domicilio que en casa entre diciembre y enero, por sus dos caras dentro y fuera, por la carga de esfuerzos desde principios de julio..., por lo que sea, ha sumado 7 de los últimos 21 puntos.

Es decir, el margen de error se ha minimizado en la Liga y el Levante llega fresquito y con ganas de demostrar su pujanza en el Ramón Sánchez-Pizjuán. De ahí que el once titular que saque este sábado, con escaso margen de rotación por el cúmulo de bajas, debe salir con todo a derrotar al Levante, pese a que inconscientemente sea difícil sustraerse a ese partido del miércoles en el Camp Nou. Ahí debe notarse la capacidad de gestión de Pablo Machín. Enero y febrero, con sus eliminatorias, traen esa otra reválida para el soriano.

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