El dato es demoledor, aunque tiene su lógica, que atañe a que es un clásico de Primera División, pero nunca ha tenido la protección mediática ni de los estamentos de la que gozan los equipos que suman más temporadas que el Sevilla en Primera, o sea, Real Madrid, Barcelona, Athletic Club, Atlético de Madrid y Valencia. El asunto es que el Sevilla sigue siendo el equipo con más expulsiones en la historia de la Liga, por delante del Valencia y el Atlético de Madrid.
El dato lo ofrece la cuenta de estadísticas @LaLigaenDirecto. La doble amarilla a Pape Gueye en el Atlético de Madrid-Sevilla fue la tricentésima cuadragésima expulsión a un futbolista del Sevilla, es decir, la 340ª. Y eso en 2.622 partidos de Primera División. Se suma a la de Fernando, que cumplió el sábado el primero de sus cuatro partidos de sanción.
#DATO La de Pape Gueye fue la 340ª (en 2622 partidos). El Sevilla es el equipo con más jugadores expulsados en toda la historia de Primera División. Le sigue Valencia (334 en 2877 encuentros) y Atlético (314 en 2828 partidos)
— Fran Martínez (@LaLigaenDirecto) March 5, 2023
De este modo, el Sevilla confirma que es el equipo con más jugadores expulsados en toda la historia de la Liga. Lo sigue de cerca el Valencia, con 255 encuentros más disputados en Primera: 334 expulsiones en 2.877 partidos. Y algo más alejado está el Atlético, con 206 encuentros más: 314 en 2.828 partidos.
Difícil recurso a Competición
Pape Gueye fue expulsado en la segunda parte del Atlético de Madrid-Sevilla. Cuadra Fernández le mostró la segunda amarilla en el minuto 81. Y redactó así en el acta la causa de esa amonestación: "Derribar a un contrario en la disputa del balón de forma temeraria".
En realidad, el mediocampista del Sevilla sale trastabillado de un primer forcejeo con Pablo Barrios, y se lanza y despeja el balón sin que haya delante ningún contrario, pero se cruza en la trayectoria de forma perpendicular Mario Hermoso y la bota izquierda de Pape Gueye termina impactando en la bota derecha del central atlético.
Otra baja trascendental
Hay impacto y según qué imagen tenga más peso para el Comité de Competición, puede entenderse como un choque fortuito producto del juego -el sevillista no podía encoger la pierna tras despejar sin oposición- o como una acción temeraria, tal y como refleja en el acta el colegiado balear, por lo que es improbable que el comité federativo desdiga al árbitro, dado que pesa el criterio arbitral y no hay error manifiesto, que es el único caso en el que quitan una amarilla, como sucedió en el caso de Sampaoli, que no había salido del área técnica cuando fue amonestado ante el Osasuna.
La jugada fue la guinda a un horrible partido. Una mezcla de infortunio y desesperación, que además dejará con seguridad una nueva baja en la nómina de futbolistas disponibles del Sevilla. Además, Pape Gueye fue de lo poco que se salvó en el desastre del Metropolitano: dio el gol y provocó el penalti.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios