Sevilla FC

Una casa museo para Agüero en Paraguay

Juan Bautista Agüero fue uno de los futbolistas de los últimos años del gran Sevilla de los 50 cuyo legado se transmitió generación a generación por tradición oral. Fue el Sevilla que tocó su último techo en la final de la Copa de España de 1962 en el Santiago Bernabéu, donde perdió ante el Real Madrid de Di Stéfano, Del Sol, Puskas y Gento por 2-1. Miles de sevillistas vibraron entonces con aquel equipo de Campanal, Achúcharro, Ruiz Sosa, Mateos, Diéguez... y Agüero. Marcó en el Sevilla 36 goles en 134 partidos, antes de fichar por el Madrid. Murió en diciembre de 2018 en Paraguay.

Ahora, año y pico después de su deceso, el que fuera campeón con el Olimpia y jugara el Mundial de 1958 antes de fichar por el Sevilla, en el que estuvo entre 1958 y 1965, está siendo reivindicado por Adolfo Ruggeri, un entrenador argentino que busca darles su sitio a veteranos del fútbol sudamericano para que el olvido no cubra su memoria de polvo.

Agüero, con la camiseta del Sevilla. Agüero, con la camiseta del Sevilla.

Agüero, con la camiseta del Sevilla. / M.G.

Así, se ha puesto en contacto con los clubes en los que militó Agüero para convertir su casa, una humilde finca rústica en su localidad natal, Caacupé, donde murió a los 83 años, en un museo. El 14 de febrero le envió una carta al Olimpia. Y ya ha recibido apoyo y material del Sevilla.

Fotos, películas antiguas, distinto material... El Real Madrid, con el que Agüero fue campeón de la Copa de Europa en 1966, también ha colaborado con este proyecto. Adolfo Ruggeri se muestra muy agradecido a ambos clubes.

"Quiero agradecer al presidente José Castro, a Monchi y a Carlos Romero, responsable de historia del club, su buena predisposición e intención para un jugador que es parte de la historia del Sevilla", dice Ruggeri

El entrenador y ex agente argentino es el promotor personal del proyecto e incluso se ha puesto en contacto con la Asociación de Fútbol de Paraguay y la Asociación de Fútbol de Argentina para casos de futbolistas retirados en precario, como el meta paraguayo Turitich, al que le pagó una prótesis en una pierna que perdió.

Esto lo arregló por su cuenta, y ahora ya tiene en marcha la Casa Museo Juan Bautista Agüero. "Espero que Sevilla y Madrid estén en la inauguración", añade ilusionado este quijote argentino del fútbol.

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