Cuelgan un muñeco hinchable y pancartas contra el Consejo de Administración del Sevilla FC

El clima que rodea al Sevilla Fútbol Club esta temporada es demencial. La mala situación del conjunto hispalense, deportiva y accionarial, ha llevado a la afición a un punto de hartazgo que no parece tener retorno. Tras el asedio a la Ciudad Deportiva, que terminó con los jugadores del primer equipo durmiendo en las instalaciones, la crispación ha aumentado a unos niveles que ya han sobrepasado los insultos y llegan a las amenazas.

Este jueves, Sevilla ha amanecido con distintos carteles contra el Consejo de Administración del combinado blanquirrojo. Dos de ellos se han colocado en distintos puentes del Aljarafe hispalense, una con los nombres de las familias Castro, Carrión, Alés y Guijarro; y otro con las frases "Junior fuera. Sevilla somos nosotros", en alusión al presidente José María del Nido Carrasco.

Sin embargo, la más impactante se ha situado en la zona de Pino Montano. Tal y como se puede ver en la imagen al inicio de la noticia, se ha ahorcado un muñeco hinchable con una bufanda del Sevilla Fútbol Club amarrada a la muñeca junto a la frase "Junior, este será tu final". Fuentes cercanas a Diario de Sevilla aseguran que esta 'performance' ya ha sido retirada, aunque hay gran constancia del tiempo que ha perdurado en distintas redes sociales.

El domingo, más madera

Lo peor para el Consejo de Administración es que al Sevilla Fútbol Club aún le queda un partido en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Los de Joaquín Caparrós reciben al Real Madrid en su estadio, que ya no será esa olla a presión que ha intentado llevar en volandas al conjunto blanquirrojo durante las últimas jornadas ligueras. Tras certificar la permanencia en Primera División, después de derrotar a la Unión Deportiva Las Palmas y la victoria del Villarreal sobre el Club Deportivo Leganés, la afición se dedicará única y exclusivamente a protestar contra los dirigentes del club.

Biris Norte ha propuesto a la hinchada blanquirroja no entrar en el coliseo nervionense hasta la segunda mitad, y centrarse en el palco, dejando de lado a un equipo que no se juega nada contra el combinado merengue. Con el objetivo de la salvación conseguido, por irreal que pudiera parecer hace apenas cinco años, a la parroquia hispalense solamente le queda esperar y ver qué ocurre en la planta noble de su club. El grito de "Dimisión" fue unánime tras derrotar a la Unión Deportiva Las Palmas, y las amenazas han llegado a un punto inquietante, por lo que los directivos deben comenzar a valorar si merece la pena seguir aferrándose a los sillones de mando.