El emotivo momento de la afición del Sevilla a su paso por el Hospital Virgen del Rocío

Lo que rodea el Gran Derbi siempre va más allá de lo futbolístico. Este tipo de partidos, que duran más de 90 minutos, comienzan prácticamente cuando acaba el anterior, y finalizan en la semana previa al siguiente. En esta ocasión, al Real Betis Balompié le ha salido cara frente a la cruz de un Sevilla Fútbol Club que no levanta cabeza y poco a poco va perdiendo las pocas esperanzas que tenía de entrar en competición europea la próxima temporada. La afición del combinado blanquirrojo sabe de sobra que su club se encuentra en caída libre, aunque no parecen dispuestos a abandonarlo a su suerte.

Se pudo comprobar en el desplazamiento al Benito Villamarín, donde la hinchada sevillista volvió a llenar la grada visitante del campo del eterno rival previo sorteo que, como siempre, dejó a más de ocho mil aficionados del conjunto nervionense sin poder acompañar a su equipo. Es habitual que el recorrido lleva a la marea blanquirroja por las inmediaciones del Hospital Universitario Virgen del Rocío, en el que el sevillismo siempre realiza una parada para dedicar unos momentos a las personas ingresadas.

Un mensaje de esperanza

En esta ocasión, se desplegó una pancarta con el lema "Fuerza campeones" mientras el corteo se detenía a las puertas del centro hospitalario. Pese a las restricciones policiales, los agentes que acompañaban no tuvieron ningún problema en esperar a que la afición sevillista saludase a las personas que se encontraban dentro del recinto, muchas de ellas asomadas a las ventanas del mismo para agradecer el gesto de apoyo y cariño.

Una vez más, Sevilla vuelve a demostrar que los colores son secundarios en momentos complicados. El Hospital Virgen del Rocío tendrá por supuesto personas béticas, pero a la afición del Sevilla Fútbol Club eso no le importó, pues saben que dentro de esas puertas se están librando partidos más importantes que los que suceden sobre el césped de los estadios de la ciudad. Ambas aficiones ya demostraron al mundo que esta forma de entender la vida es distinta a todo tras los fallecimientos de Antonio Puerta y Miki Roqué.