El guiño de Bono a Andalucía y al Sevilla FC: "A ver si pronto puedo volver para estar con mi gente"

La vida ha cambiado mucho para el Sevila Fútbol Club desde que se fuera Yassine Bono. El marroquí, considerado por muchos el mejor portero de la historia de la entidad hispalense por encima de Andrés Palop, marcó a una generación con sus actuaciones que sirvieron para ganar dos UEFA Europa Leagues. Nadie olvida aquella lesión de Tomas Vaclik que colocó al ex del Girona bajo palos cuando casi nadie confiaba en él. Sin embargo, y pese a las dudas generadas, rindió con creces para tocar plata, llegando incluso a consagrase Zamora de LaLiga durante su último curso en Nervión.

21 millones de euros pagó el Al-Hilal saudí para hacerse con los derechos de un cancerbero que dejó huérfano a los suyos. Ni Marko Dmitrovic, ni Orjan Nyland, ni Álvaro Ferllo han sido capaces de tapar la alargada sombra del espigado portero, que nunca ha escondido su amor por el que fuera su equipo y lo lanzase al estrellato mundial. De hecho, hace apenas un mes, Bono recibió un partido homenaje entre los blanquirrojos y el Wydad AC de Casablanca, equipo en el que se formó, donde se pudo ver a su hijo con la elástica del cuadro nervionense.

Ahora, mientras el Sevilla Fútbol Club continúa preparando la temporada 2025/2026 tras las incorporaciones de Antonio Cordón a la dirección deportiva y de Matías Almeyda al banquillo, el guardameta se encuentra en Estados Unidos disputando el Mundial de Clubes, en el que ha tenido un debut que no olvidará. El Al-Hilal se medía al nuevo Real Madrid de Xabi Alonso. Gonzalo García adelantó a los merengues a la media hora de juego, igualando Rubén Neves el encuentro desde los once metros tan sólo siete minutos después. Cuando todo parecía que terminaría en tablas, un penalti a favor de los blancos en el tiempo añadido hizo temblar las aspiraciones del cuadro saudí. Fede Valverde se disponía a realizar el lanzamiento ante un Yassine Bono que lo detuvo sin muchos problemas para certificar un empate más que meritorio.

Tras el encuentro, el marroquí atendió a los medios de comunicación presentes a las afueras del estadio, y las cámaras de ElDesmarque captaron un detalle que ha sorprendido y emocionado a la afición sevillista. El cancerbero luce en su mochila un parche con la bandera de Andalucía y, al ser cuestionado por él, no dudó en reconocer su nostalgia por la que fuera su casa durante cuatro temporadas: "Andalucía es mi gente y las quiero mucho. A ver si pronto puedo volver ahí para estar con mi gente".

Tanto las respuestas como los citados del tweet demuestran el amor del sevillismo por un jugador que terminó convirtiéndose en un ídolo en Nervión. La salida de Yassine Bono es, sin duda, una de esas que han empobrecido sobre el césped a un Sevilla Fútbol Club que ha dejado de luchar por títulos para hacerlo por puestos de descenso. Con las dudas de cómo será la temporada que se avecina, en la parroquia del Ramón Sánchez-Pizjuán aún sueñan con un regreso del cancerbero a Nervión, aunque sea dentro de muchos años.