El jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, se convirtió en el primer líder occidental en visitar la ciudad japonesa de Fukushima. Fue en el marco de un viaje oficial de tres días a Japón y coincidió con una nueva fuga de agua contaminada desde la planta nuclear dañada por el sismo y el tsunami de 2011. Rajoy inauguró en Fukushima la exposición Flores de invierno, una reflexión del artista español José María Sicilia sobre la tragedia de hace dos años y medio, y participó en un acto con cinco de los llamados héroes de Fukushima, los militares que intentaron frenar el desastre tras el accidente de la central.

"Los temores (sobre Fukushima) son infundados", llegó a decir Rajoy. Sus palabras se producían sin embargo pocas horas después de que Tokyo Electric Power Co (Tepco), que opera la central, informara de una nueva fuga y dijera que posiblemente una parte de los 430 litros fugados se vertiera en la noche del miércoles al océano Pacífico, según indicó la agencia de noticias Kyodo.

"Algunas personas fuera de Japón ligan Fukushima al desastre nuclear y lo pronuncian con temor", dijo Rajoy. "Es un temor que no hace justicia a los esfuerzos que ha hecho el pueblo japonés para volver a la normalidad, es un temor infundado, y espero que mi presencia contribuya a disipar estos temores", añadió.

El tanque de la central de Fukushima en el que se produjo la nueva fuga, de 450 toneladas de agua, se encuentra en una especie de rampa. Al llenarse los trabajadores no repararon en el grado de inclinación del depósito, por lo que este, que no estaba cerrado herméticamente, se derramó, explicó el portavoz de Tepco, Hiroki Kawamata. En el tanque hay agua contaminada con rayos beta, incluyendo estroncio 90. Pese a la sucesión de problemas y la incógnita de cuál es la cantidad de agua contaminada que se ha derramado al mar, el portavoz del gobierno japonés, Yoshihide Suga, aseguró, según medios nipones, que la situación "en su conjunto está bajo control".

Rajoy ha realizado una visita oficial de tres días a Japón, con motivo del Año Dual con el que los dos países conmemoran 400 años de relaciones diplomáticas. El miércoles fue recibido por el emperador Akihito. Este jueves, tras regresar a Tokio en tren bala desde Fukushima, se reunió con el primer ministro nipón, Shinzo Abe, y ambos hablaron sobre la necesidad de que las economías de sus países vuelvan a la senda del crecimiento. Los dos jefes de gobierno confirmaron además que sus países apoyarán la expansión de empresas japonesas y españolas en los mercados latinoamericanos y asiáticos, compartiendo información y experiencia.

En una entrevista con el diario económico Nikkei, Rajoy aseguró que quiere que las empresas japonesas contemplen a España como una puerta de entrada no solo a los mercados de la zona euro, sino también a América Central y Suramérica. El jefe del Ejecutivo español saludó la futura participación de Japón como observador en las Cumbres Iberoamericanas.