Los hechos tuvieron lugar la pasada madrugada del viernes, 5 de mayo, al sábado, día 6, cuando un grupo de tres chicas conoció a otros tres chicos en el distrito madrileño de Villaverde, concretamente en una discoteca.

La agresión sexual

Después de pasar la noche juntos en el local de odio nocturno, los chicos le ofrecieron a las chicas continuar la fiesta en el piso de uno de ellos, ubicado en el distrito de Tetuán, también en la capital.

Las chicas aceptaron la invitación y allí siguieron bebiendo hasta que le ofrecieron a una de ellas consumir una sustancia blanca. Le hicieron creer que se trataba de cocaína rosa y la joven la tomó voluntariamente hasta quedar completamente dormida. Según parece, sus amigas seguían en el domicilio en ese momento.

Sin embargo, cuando la chica se despertó, horas después, comprobó que estaba siendo agredida sexualmente por los tres hombres en una de las habitaciones del piso. Logró pedir auxilio y salir del piso junto a sus dos acompañantes.

En ese momento una patrulla de la Policía Municipal de Madrid pasaba por allí por lo que le pidieron ayuda y le contaron lo sucedido. Cuando los agentes acudieron al piso donde supuestamente habían tenido lugar los hechos, los presuntos autores de la agresión sexual ya no estaban allí.

Los hombres, a pesar de que aun no han sido detenidos, ya están identificados y es posible que se produzca la detención en las próximas horas para que se esclarezca lo sucedido.

La presunta víctima a la que sometieron y violaron grupalmente tiene 21 años y es la Unidad de Atención a la Familia y Mujer (UFAM) de la Policía Nacional la que investiga la agresión sexual según han informado a la agencia EFE fuentes policiales.

Qué es la sumisión quimíca

La sumisión química puede definirse como la agresión sexual, robo, extorsión y/o maltrato, sufridos bajo la influencia de sustancias psicotrópicas

Es decir, es la anulación de la voluntad de la víctima mediante el uso de drogas para agredirlas sexualmente. Cometer una agresión sexual con sumisión química a la víctima se considera un agravante tras la nueva ley de libertad sexual, por lo que podría sumar a la pena entre 2 y 3 años de cárcel.

Tipos de sumisión

Según el protocolo de actuación ante la sumisión química elaborada por médicos de urgencias, se distinguen tres tipos de sumisión, entre las que figura la química oportunista, que se produce cuando la víctima ingiere de manera consciente y voluntaria drogas o bebidas alcohólicas, y el agresor aprovecha su estado para cometer los delitos.

El segundo tipo es conocido como la proactiva, donde el agresor intoxica a la víctima de forma deliberada sin consentimiento ni conocimiento de ésta y, por último, si se combina el consumo voluntario e involuntario de sustancias, se trataría de una sumisión química mixta. 

Cómo actuar

Los profesionales de la salud aconsejan comunicar de inmediato a alguien cualquier sospecha, especialmente si se nota un pinchazo, así como acompañar a quien haya pedido ayuda y nunca dejarlo solo o sola. Tras ello se debe llamar a Emergencias para que se active un protocolo de actuación que implica hacer un análisis médico a la víctima así como administrarle anticonceptivos de urgencia ante la sospecha de que haya llegado a ser violada.

En el caso de la presunta violación ocurrida en Madrid, los supuestos agresores se enfrentan a una pena de 7 a 12 años de cárcel a la que se le suma el agravante de haberlo hecho en grupo.