Sergio Álvarez, el joven de León que se convirtió en una estrella por conseguir salir en el DNI con un palillo en la boca, ya no podrá usar su mítico carné que consiguió sacarse tras una apuesta con su tío y con su hermano. La Policía Nacional le requirió que se pasara por dependencias policiales para hacerse un carné nuevo, pero esta vez sin su peculiar palillo en la boca. La propia Policía quiso así prevenir para que no sirva de ejemplo para otras personas que quieran imitarlo.

Palilloman decidió acudir a una comisaría leonesa, para atender a la Policía y no arriesgarse a no estar identificado.Antes ha tenido que interponer una denuncia porque, en teoría, y según cuenta Palilloman, este fin de semana mientras estaba de fiesta perdió su preciado tesoro. De este modo, la historia ha acabado donde todo comenzó, en una mesa de una comisaria leonesa.