Si para algo ha servido la pandemia es para valorar el espacio, el aire libre, la libertad. Las posibilidades que ofrecen los entornos rurales –y que, desde luego, no se les pueden pedir a las ciudades-, en el término municipal de Almonte, con su enorme extensión y tres núcleos de población tan diversos paisajísticamente hablando, se han convertido en un paraíso de posibilidades. Es momento de abrir una nueva ventana al mundo, de mostrar toda la riqueza de la que pueden disfrutar sus habitantes y también sus visitantes, y no sólo en momentos puntuales como la Romería del Rocío, el Traslado o los meses de sol y playa, sino durante todo el año.

Por ello, la Concejalía de Turismo del Ayuntamiento de Almonte emprendió hace unos meses un concienzudo trabajo que comprende no sólo la total reestructuración de la marca, sino la adopción de las nuevas tecnologías para trasladar al potencial visitante toda la oferta de los tres núcleos de su término municipal, con un papel destacado a esa joya que marca su idiosincrasia: el Parque Nacional de Doñana.

Del mismo modo, pretende trasladar la enorme dimensión geográfica del territorio que ocupa el término de Almonte, la diversidad de sus ecosistemas, y también de sus tradiciones y costumbres. Es por tanto una llamada a la desestacionalización que permite una oferta que va más allá de los hitos anuales por todos conocidos. Almonte, El Rocío y Matalascañas ofrecen amplitud, naturaleza, patrimonio histórico artístico, deporte, paz y relax durante todo el año.

Y para llegar al visitante actual, el Ayuntamiento de Almonte se embarca en una apuesta global por las nuevas tecnologías que se materializa, en primer lugar, en el próximo lanzamiento de una aplicación accesible para iOs y Android y que ofrece distintos contenidos.

Todo el año, Destino Doñana

En primer lugar, cuatro rutas prediseñadas para guiar al visitante por el patrimonio histórico artístico de Almonte, incluidos los tres palacios del Parque –Marismillas, Acebrón y Palacio de Doñana-. Una segunda ruta nos lleva a conocer las enigmáticas torres almenara diseminadas por la extensa costa almonteña: desde la del Río del Oro, fronteriza con Mazagón, hasta la de San Jacinto, en la desembocadura del Guadalquivir.

También se puede profundizar, en las otras dos rutas disponibles, en dos de las tradiciones más ancestrales y que más interés suscitan en los foráneos: la Saca de las Yeguas y la Venida de la Virgen. La Saca de las Yeguas se ha convertido en una cita imprescindible. Esta tradición ganadera, regulada en 1504 por el Duque de Medina Sidonia, seduce a propios y extraños con su fuerza natural, simbiosis perfecta entre el hombre y la naturaleza con momentos de extraordinaria belleza en los que destacan la bendición de las yeguas en El Rocío y la entrada de las tropas en Almonte.

Por su parte, la Venida de la Virgen a Almonte y su posterior traslado al Rocío, que tradicionalmente tienen lugar cada siete años –ahora interrumpido el traslado a causa de la pandemia-, suponen un testimonio de fe y devoción a la Virgen del Rocío absolutamente sobrecogedora, en la que destaca la demostración de hermandad y vecindad que protagonizan los habitantes del Rocío y Almonte, que durante meses preparan la profusa decoración de las calles de ambos núcleos.

La aplicación también ofrecerá la geolocalización de todos los puntos susceptibles de ser visitados, lo que es posible diseñar una ruta propia; un amplio reportaje fotográfico y videos en 360º e imágenes aéreas que permiten visualizar los enclaves con extraordinario detalle y la posibilidad de gestión de puntos de visita, GPS y Checklist en tiempo real, entre otras opciones y prestaciones.

Pero la inmersión de la oferta turística de Almonte en las nuevas tecnologías no acaba aquí: muy pronto, el Ayuntamiento de la villa presentará otras herramientas que está ultimando en estos meses.