Vuelven las lluvias y el viento fuerte a Sevilla. Tras el duro temporal vivido el lunes con el paso de la tormenta Daniel, otra profunda borrasca, llamada Elsa, va a comenzar a atravesar la Península Ibérica a partir de este miércoles, reactivando la alerta amarilla en la provincia.

La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) advierte de que "el viento será muy adverso" y que la borrasca lleva asociados "varios sistemas frontales muy activos" que se desplazarán de oeste a este y que tendrán especial incidencia en las zonas más occidentales.

El tiempo para las próximas jornadas.

De esta forma, la jornada de este miércoles irá complicándose en Sevilla conforme avancen las horas. Los cielos se irán encapotando cada vez más con el riesgo de precipitación en aumento en las últimas horas del día. Atención al viento de componente sur, que aumentará de fuerza durante la tarde. Las temperaturas oscilarán entre los 7ºC de mínima hasta los 19ºC de máxima.

Alertas por lluvia y viento en Andalucía el jueves 19 de diciembre.

La situación será más difícil en los dos días posteriores, cuando se activarán las alertas amarillas en toda la provincia por fuertes lluvias y un viento de hasta 80 km/h. Ambos avisos estarán vigentes todo el jueves y se mantendrán, en principio, hasta las primeras horas del viernes. En el caso de la Sierra Norte, el aviso será naranja entre las 18:00 y medianoche de mañana, ya que se esperan rachas de aire de hasta 90 km/h.

Vigencias de las alertas.

La probabilidad de precipitaciones para estas dos jornadas será del 100%, con una previsión de acumulación de 40 mm en 12 horas.

El sábado seguirá siendo un día lluvioso, aunque parece que para entonces lo peor ya habrá pasado. El viento amainará y comenzarán a verse más claros en los cielos.

Todo esto llega cuando apenas se han olvidado las impactantes imágenes que dejó la tormenta Daniel el lunes. El frente dejó en Sevilla más de 600 incidencias y un niño herido. En la capital se registraron 430 y en la provincia, 263. Las fuertes rachas de viento (cercanas a los 80 kilómetros por hora), que vinieron acompañadas de lluvia, aparato eléctrico y hasta de granizo en algunos municipios, pusieron patas arriba muchas localidades.