Juan Ortega, en la antesala de su contratación en Sevilla

EL REPASO

El diestro sevillano ya ha recibido la oferta de Pagés para ajustar tres tardes en el abono de la temporada pero la gran noticia taurina de la semana que se fue sigue siendo la revitalización del Premio Nacional de Tauromaquia

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Juan Ortega
Juan Ortega pasea las dos orejas en la pasada Feria de Abril. / Juan Carlos Muñoz

El asunto trascendía el viernes en las órbitas del matador sevillano. José María Garzón, apoderado de Juan Ortega, había recibido la llamada de Ramón Valencia para ajustar la presencia del torero en la Feria de Abril. La oferta es de tres tardes. Dos en primavera –repartidas entre la preferia y farolillos- y una tercera en San Miguel. La llamada, que se antoja un poco tardía, se produce en un contexto incómodo y evidente. Ortega se había quedado fuera del cartel del Domingo de Resurrección a pesar de ser el candidato perfecto, natural y necesario para la inmensa mayoría de los aficionados… 

Nada que no se haya contado ya por activa y por pasiva. La exclusión de la lujosa apertura pascual se producía, además, con otro telón de fondo: la adjudicación de la plaza de toros de Santander a la empresa Lances de Futuro –denunciada por Pagés y Matilla- en un horizonte plagado de guerras frías… y no tan frías que aflorarán a la vez que avance el año. 

La oferta de Pagés está pendiente aún de la conversación definitiva, en vivo y en directo, en los despachos de la calle Adriano. Ortega y Garzón están a punto de volver de México donde el diestro sevillano ha culminado su temporada americana. La última cita, este mismo domingo, fue en el ruedo de Guadalajara marchándose de tierras aztecas con el buen sabor de boca de la notable faena firmada con un toro de Pozo Hondo. Sin solución de continuidad, el próximo domingo iniciará su temporada española en la feria invernal de Valdemorillo. Esto ya no tiene vuelta atrás… 

Una llamada a la calma… 

Deshaciendo el camino del Nuevo Mundo, torero y poderdante tendrán tiempo de madurar la oferta de Valencia. El ofrecimiento incluye de las corridas de Domingo Hernández y la de El Parralejo; también suena la de Victoriano del Río. La primera le sirvió el año pasado para firmar la mejor faena del año en la plaza de la Maestranza. En ese cartel ya tendría plaza fija Morante de la Puebla que, ya era sabido, estoqueará también las dos corridas de Cuvillo, la de Garcigrande y la Matilla. Respecto a la de El Parralejo hay que subrayar que revaloriza su cartel gracias a la contundencia de sus resultados. Roca Rey la reclama para sí. Ahí podría estar Ortega; también Miguel Ángel Perera por méritos más que obvios. ¿Cuál será la tercera tarde de Ortega? En San Miguel repiten los hierros de Cuvillo –con Morante de padrino de Zulueta, que podría torear mano a mano con Marco Pérez el lunes de preferia- Victoriano del Río y Garcigrande. Hay donde elegir… 

En el entorno de Ortega se llama a la calma y se ha atendido la oferta con interés. La consigna es no entrar en polémicas, torear de acuerdo a la categoría adquirida del torero y no echar gasolina a ningún fuego. La confección de la Feria de Abril –o mayo- continúa su curso con el colchón temporal que presta una cuaresma tan tardía. Quedan aún muchas puntadas, bastantes apoderados por recibir y encajar, quién sabe si algún cambio inesperado…  

La Fundación del Toro de Lidia, presidida por Victorino Martín, ha sido vital en la recuperación del premio.
La Fundación del Toro de Lidia, presidida por Victorino Martín, ha sido vital en la recuperación del premio. / Europa Press/Carlos Luján

El mérito es de la Fundación del Toro de Lidia 

La semana pasada también sirvió para cargar las pilas del sector gracias al empeño –no correspondido por tantas órbitas del negocio taurino- de la Fundación Toro de Lidia. La revitalización del Premio Nacional de Tauromaquia, rescatado de la morgue cultural de un ministro de descoloniza museos y se marcha al circo a la misma hora que se inaugura Notre Dame de París, ha sido posible por el empeño de la FTL y la cobertura del Senado del Reino de España. El reto era catalizar las voluntades desordenadas de las nueve comunidades autónomas que salieron en tromba tras la cancelación del galardón dentro de la lista de los premios nacionales de Cultura. 

Había sido creado, no se olvide, por un gobierno socialista. El mismo que auspició –el difunto Alfredo Pérez Rubalcaba a los mandos- el traspaso más o menos simbólico de las competencias de Interior a Cultura en el verano de 2011. La creación del premio, dos años después, iba a ser el siguiente paso… En aquel momento la pugna política quedaba aún lejos del descalzaperros del sanchismo, de una izquierda que ha ido comprando todas las mercancías averiadas del universo woke para chapotear en los charcos que haga falta. 

Las orejas del lobo… 

Lo dejamos ahí pero conviene resaltar como merece que dentro de esas nueve comunidades que se han sumado al rescate del Premio Nacional de Tauromaquia figura la de Castilla-La Mancha, feudo socialista que preside Emiliano García-Page, verso suelto en la baronía de Ferraz que suele moverse en la foto sin demasiado disimulo. Si el premio se ha anunciado con categoría de gran acontecimiento en la Puerta del Sol –rompeolas de todas las Españas- será fallado la semana que viene en Toledo, capital castellano manchega. La entrega será en el Senado, revistiendo una notoriedad insospechada. El tiro por la culata, señor Urtasun… 

Pero no conviene ponerse demasiado estupendos mientras avanza la ILP inversa, alentada por el lobby animalista, que pretende revocar el actual blindaje legal de la tauromaquia, considerada patrimonio cultural de España en la ley 18/2023. Aquella ley surgió de otra ILP que tuvo su foco en la abolición catalana, revocada de derecho pero no de hecho. El asunto tiene derivadas legales que se le escapan a este Repaso semanal. Pero las orejas del lobo –tan querido por los ecologistas de salón- vuelven a asomarse…  

 

 

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