Vivir en Sevilla

Bares y cocheros, juntos frente a la pandemia

  • Con la iniciativa 'A caballo regalado no le mires el diente' ofrecen un paseo en coche de caballos y un menú degustación a 20 euros por persona

Cochero y hostelero, unidos contra la crisis económica por la pandemia.

Cochero y hostelero, unidos contra la crisis económica por la pandemia. / M. G.

Está claro que la crisis sanitaria que estamos viviendo está afectando a muchos sectores económicos. A unos más que a otros. La hostelería se está llevando la peor parte del pastel, con más de 500 negocios que han echado el cierre en nuestra ciudad, y los datos siguen subiendo. Otro colectivo que está padeciendo una de las mayores crisis de su historia es el de los choches de caballos. El recorte de horarios a los establecimientos hosteleros y sobre todo la falta de turistas tiene paralizado al sector.

Para intentar paliar esta situación La Vespa Bermejales y un grupo de cocheros profesionales de Sevilla se han unido a través de la iniciativa A caballo regalado no le mires el diente, una propuesta por la que ofrecen un paseo en coche de caballos de aproximadamente una hora de duración por la zona monumental de Sevilla y un menú degustación en La Vespa Bermejales a un precio muy popular, 20 euros por persona. El grupo mínimo sería de 4 personas. Esta oferta tendrá lugar de lunes a domingo, con horarios de salida y llegada en La Vespa Bermejales, en la Avenida de Alemania esquina Paseo de Europa, a las 12:45 y a las 14:15. El menú degustación para cuatro personas constará de ensaladilla, papas arrugás, huevos con patatas, nachos vesperos, tartar de salmón y cachopo XXL, más una bebida por persona.

Cartel promocional de la campaña. Cartel promocional de la campaña.

Cartel promocional de la campaña. / M. G.

Los responsables de esta iniciativa se muestran expectantes y confirman que ya tienen varias reservas y llamadas de gente interesándose por la oferta. Iván Jiménez, cochero en Sevilla desde hace 22 años, cree que esta iniciativa puede funcionar, "unidos somos más fuertes. Llevamos casi un año sin trabajar y no nos importa bajar los precios para por lo menos darles de comer a nuestros niños y a los caballos", señala Iván.

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