Cuarenta años a lomos de un sueño

La Escuela de Equitación Espigares, volcada en la integración del caballo desde el punto de vista social, conmemora su efeméride con un programa especial de actos en sus instalaciones

Instalaciones. El 25 de marzo arrancan los actos del cuarenta aniversario en la escuela (Vía Flaminia, s/n, Dos Hermanas), donde hay espacio para 55 boxes, dos pistas cubiertas, tres exteriores, aula de formación y aula multidisciplinar. / M. G.
A. Fernández

19 de marzo 2017 - 02:31

Este año, la Escuela de Equitación Espigares, ubicada en el término municipal de Dos Hermanas, cumple 40 años. Con motivo de este especial acontecimiento, se ha preparado una serie de actos que tienen como misión resaltar el valor del poni/caballo en la sociedad como elemento de integración social.

Para poder trabajar en este camino, en 2011 se creó la Fundación Carlos Espigares (Fundcaes) en homenaje al fundador de la escuela, profesor de equitación y persona que dedicó su vida al mundo del equino. La idea de crear la fundación surgió de la familia de Carlos Espigares (fallecido el 11 de septiembre de 2011) y de sus alumnos, como una manera de perpetuar los valores y la motivación que Espigares inculcaba en su enseñanza a los niños y jóvenes, y llevarlos a los entornos más necesitados. "Todo lo que no se da se pierde", afirmaba el sevillano.

40 años es motivo suficiente para desarrollar un programa especial de actividades que arrancan el próximo 25 de marzo con la fiesta Ayer, hoy y mañana de Equitación Espigares, donde se entregarán los Premios Fundación Carlos Espigares.

Pequeños y mayores podrán disfrutar de talleres, juegos, certámenes de repostería, exhibiciones, cursos de fisioterapia para equinos, y otro taller donde los niños serán los profesores y los padres los alumnos.

Otro de los eventos, previsto en marzo, es Aprendiendo de ellos, un encuentro de convivencia con Sandra de Isidro, especialista en doma natural, avalada por la Asociación Nacional de Doma Natural. Sandra de Isidro trabaja tanto a nivel físico como psicológico. Conocedora de la naturaleza del poni y del caballo, y de su lenguaje corporal, "busca en todo momento la armonía entre ellos y nosotros", reconoce Yolanda Hernández, profesora de Espigares.

La equitación es un deporte muy completo y de múltiples beneficios. "Aporta mucho más de lo que podemos imaginar. No se trata únicamente de un deporte como podemos pensar en primera instancia, es algo más al tratarse de alcanzar un binomio perfecto, es entender y comprender a nuestro compañero, que es mucho más que un animal, se convierte en un amigo único", se puntualiza desde la fundación.

Para montar un animal como el poni o el caballo es imprescindible gestionar todas las situaciones con calma, pero con firmeza y responsabilidad. "Sabemos que la sensibilidad del poni/caballo es muy sutil y lo percibe todo. Además, montar requiere disciplina y concentración, dos acciones que con el tiempo nos beneficiarán no sólo en el deporte, sino también en nuestras habilidades sociales y nuestro rendimiento laboral o escolar. Por otro lado, la equitación es una actividad que también nos ayuda a relajarnos y nos enseña a desconectar", añaden.

La escuela, fundada en 1977 en Dos Hermanas, frente a la actual Ciudad Deportiva del Sevilla FC, ofrece clases a niños a partir de 4 años y hasta la edad adulta, tanto niveles de principiante como avanzados. Las clases se imparten de lunes a viernes mañana y tarde, y sábados sólo por la mañana. Sábados por la tarde y domingos por la mañana se destinan a otras actividades.

Cuenta, entre otros elementos, con 50 boxes para alojamiento de caballos, 5 boxes para alojamiento de ponis y burros; pista cubierta para ponis; pista cubierta de 40x20 metros; pista cubierta de 20x15 metros; tres pistas exteriores de 45x20 metros; pista exterior de 65x25 metros; pista exterior de 70x30 metros; aula de formación y aula multidisciplinar.

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