El paseo diario y las habituales prisas por las calles de Sevilla hace que muchos de los ciudadanos no se den cuenta del entorno por el que se mueven a lo largo y ancho de la ciudad. Habría que ir más centrado en disfrutar del paisaje o ponerse de cuando en cuando las gafas de "turistas en nuestra propia ciudad" para poder apreciar las joyas arquitectónicas que hay repartidas por la capital andaluza. 

Parte de esos tesoros repartidos por la ciudad son las fuentes históricas, son un patrimonio apenas reconocido por los paseantes pero que ponen en contexto los diferentes momentos que ha vivido la ciudad y cuál ha sido el estilo que predominaba en la época en la que se construyeron estos elementos. Las fuentes además de elementos decorativos han servido a lo largo de su historia para hacer más sencillo el día a día de los ciudadanos, brindándoles la posibilidad de recolectar agua y poder refrescarse cuando el calor aprieta. 

Fuente de Mercurio

Fuente del dios Mercurio

Esta es una de las fuentes más antiguas de Sevilla ya que data de 1576 y se encuentra frente al Banco de España en la plaza de San Francisco, uno de los puntos neurálgicos de la ciudad. Al ser tan antigua ha sufrido muchos cambios y remodelaciones con el paso del tiempo y la pieza actual es de 1974 y su autor es Rafael Manzano Martos. Tiene una estética barroca y está coronada con el dios grecorromano Mercurio que se encargaba del comercio. 

En sus inicios esta fuente tenía una función esencial, abastecer a los vecinos con agua potable para poder vivir. 

Plaza Virgen los Reyes

Fuente plaza Virgen de los Reyes

Es una de las fuentes más fotografiadas de Sevilla ya que tiene a su espalda la Catedral de la ciudad, el monumento más visitado. Por ella pasan a diario miles de turistas que se paran a observar el paisaje y poder refrescarse mientras están en uno de los barrios más antiguos de Sevilla. Se construyó en 1929 y su autor fue José Lafita Díaz y el propósito era que este elemento además de ser una fuente para poder beber y refrescarse sirviera para dar luz a la Catedral y a la Giralda. 

Además de los dos monumentos más visitados e icónicos de Sevilla, esta fuente tiene a su alrededor la Puerta de Palos de la Catedral de Sevilla,  el Palacio Arzobispal y una de las calles peatonales más famosas de la ciudad, Mateos Gago, que abre su paso al barrio de Santa Cruz. 

Fuente Catalina de Ribera

Fuente de Catalina de Ribera

La que fuera fundadora del Hospital de las Cinco Llagas tiene una fuente en su nombre en el paseo que también lleva su nombre y apellido. Fue realizada por Juan Talavera en 192. Tras los jardines del Alcázar y al lado de los Jardines de Murillo se encuentra ubicada esta fuente tan majestuosa. En la parte central hay un retrato de la mismísima Catalina y a ambos lados hay un par de pinturas que tienen motivos florales. 

En un alarde de creatividad del arquitecto de esta fuente, decidió que era perfecto usar para esta fuente una pieza de una antigua fuente del siglo XVI y que estuvo en la plaza del Pumarejo durante el siglo XVIII. 

Fuente de Híspales

Fuente de Híspalis

En plena Puerta de Jerez se encuentra esta fuente inspirada en la Cibeles de Madrid pero sin leones. Fue obra de Manuel Delgado Brackembury para la Exposición de Iberoamericana de Sevilla en 10929. Es una obra que está coronada por una Nereida sobre una flor de loto , que representa a la ciudad. En su decoración hay motivos marinos como tortugas o delfines, también hay niños que representan el futuro de la ciudad. 

A pocos metros de la fuente se encuentra uno de los hoteles más icónicos de la ciudad, el Hotel Alfonso XII, que también fue una de las obras maestras que se construyeron en 1929 para alojar a los turistas con más poder adquisitivo. Esta fuente también se ha convertido en lugar de referencia para la afición del Sevilla F. C ya que cuando el equipo gana algún título, los aficionados acuden a este lugar a celebrarlo. 

Fuente de las Ranas

Fuente de las Ranas

La fuente de las Ranas es de 1914, es una de las más antiguas del parque y pueden apreciarse a ocho ranas que brotan agua en dirección al centro de la fuente en el que hay un pato apoyado sobre una tortuga. Es una de las fuentes más destacadas del Parque de María Luisa y ha sido una inspiración para muchos sevillanos que han querido honrar esta obra recreándolas en los patios de sus casas. Es obra del ceramista Manuel García Montalván. 

Fuente de Plaza España

Fuente de la Plaza España

Esta obra circular que preside el monumento de la plaza de España es obra de Vicente Traver y Tomás y fue construida en 1929 , el mismo año en el que Aníbal González también diseño y obró la que sería una de las plazas más famosas y bellas del mundo. 

Fuente de las Cuatro Estaciones

Fuente de las Cuatro Estaciones

En el Prado de San Sebastián esta esta fuente. Fue construida en 1929 por Manuel Delgado Brackembury y contribuyeron Eduardo Castillo y Manuel García. Es una obra alegórica acerca de las cuatro estaciones que hay en un año, por eso recibe el nombre de las cuatro estaciones. Todas están representadas por figuras femeninas. 

Una anécdota curiosa acerca de esta fuente es que ha servido como ornamento fijo para las portadas de la Feria hasta 1973, aunque la que más llamó la atención y en la que más destacaba fue en la de 1966.