Salir a comer: Mucho sabor a orillas del Guadalquivir

La apertura de un nuevo negocio siempre es una buena noticia. Sobre todo, si detrás del proyecto hay un equipo joven y con ganas de ofrecer una experiencia agradable a la mesa. Es el caso de Malaspina, el restaurante que da sus primeros pasos a orillas del Guadalquivir y frente al que está el joven chef madrileño Sergio García Gironda.

Ha trabajado en cocinas muy diferentes, acercándose a las técnicas más vanguardistas pero sin olvidar lo que para él es el ingrediente principal de un plato: el sabor. Sergio García Gironda ha desarrollado su trayectoria en establecimientos tan conocidos como el Café de Oriente o la Taberna del Alabardero de Madrid, así como en otros locales de ciudades como Burgos, Valencia o Santander. De todos ellos ha aprendido algo y toda esa experiencia es la que deposita ahora en la carta de Malaspina, que abría hace apenas unos días en el Muelle de las Delicias con un almuerzo convocado por Organiza Eventos.

De todos los platos, los arroces, una de las especialidades del joven chef, ocupan un lugar privilegiado. De hecho, la idea del chef, con una amplia experiencia también en formación de equipos y asesoramiento a profesionales y que se encarga de cuidar hasta el último detalle del establecimiento, es que no falte un arroz con cada temporada. Otra de las apuestas de la carta es el pescado fresco de Isla Cristina y los platos a base de las verduras y hortalizas que cultivan en el huerto ecológico propio que tiene Malaspina.

Con una terraza a orillas del río, una zona para tapear y dos plantas de restaurante, Malaspina nace con la vocación de ser un referente también para eventos en pleno centro. Precios asequibles, una cuidada carta de vinos y una atención especializada completan las propuesta de una de las últimas novedades gastronómicas de la ciudad.