La artesanía de dar forma al carey
EN PERSONA · INMACULADA SERRANO
Monitora de talleres de carey en distritos municipales y en Dos Hermanas, sus originales diseños ya han sido lucidos en pasarelas de moda flamenca. Su artesanía, como otras tantas, corre el riesgo de desaparecer. "No todo el mundo ve la diferencia entre una peineta de carey y una de plástico".
Con resignación, esta artesana del carey cuenta como sus originales diseños han sido en más de una ocasión copiados. "Son elaborados con materiales más baratos, como el plástico, y vendidos a un precio irrisorio". Es difícil abrirse camino, pero no cae en el desánimo y apuesta por la creatividad y la enseñanza de su técnica como principales bazas para hacer entender lo importante de esta artesanía. Monitora de talleres de carey en distritos municipales y en Dos Hermanas, Inmaculada Serrano estudió dibujo y diseño publicitario en la Escuela de Artes y Oficios. Su formación le llevó hasta Italia, donde trabajó en el diseño de la cerámica. Natural de Priego de Córdoba, a su regreso, montó un taller de cerámica y diseño, que tuvo que abandonar cuando se casó y fijó su residencia en Sevilla. De eso hace más de 20 años, en los que ha dedicado su tiempo a impartir talleres de pintura en tela, manualidades y carey. Entre sus recuerdos, guarda con especial cariño "cuando montamos una empresa de complementos elaborados a base de carey y participamos en Simof y varios diseñadores los lucieron en la pasarela". Hoy, Inmaculada se dedica al trabajo por encargo y a su tarea como monitora. Sus creaciones -pulseras, broches, peinetas, abanicos...- guardan un sello personal que teme que se pierda en el tiempo. "Aunque es fácil aprender la técnica, la capacidad de crear diseños originales lo hace único y, muchas veces, a eso no se le da valor".
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