Una carta con estilo propio
LA MAFIA SE SIENTA A LA MESA
La pasada semana, la cadena de restaurantes La Mafia se sienta a la mesa recibía el galardón Hot Concepts España 2014 en la modalidad de Casual Restaurant. Este premio, celebrado en el marco de Expofood Service que organiza la revista Restauración News, reconoce la calidad de los productos de la carta, la ubicación y singularidad de los establecimientos y la atención al cliente de esta red de franquicias especializada en cocina italo mediterránea y originaria de Zaragoza. En Sevilla, la cadena aterrizaba en marzo de 2010 de la mano del empresario sevillano Arturo Santos, que en diciembre de 2011 abría un segundo local en Tomares y el pasado mes de octubre un tercero en los bajos del hotel Meliá Lebreros. En apenas cuatro años, son más de 50 trabajadores los que forman parte del equipo sevillano de La Mafia, convertido hoy en todo un referente para los que buscan en la ciudad lo mejor de un restaurante a un precio apto para prácticamente todos los bolsillos.
Para Arturo Santos, el éxito de La Mafia en Sevilla no tiene ningún secreto: "Ofrecemos un trato exquisito y productos de calidad en un entorno diferente donde cada detalle importa y el ticket medio no supera los 18 euros". A ello se une, continúa, "un equipo joven, muy profesional y entregado al trabajo con el que hemos formado una gran familia y que ha hecho posible que nuestra clientela sea muy fiel".
Como cada uno de los restaurantes de La Mafia -la firma planea iniciar en breve su expansión internacional-, los establecimientos sevillanos se caracterizan por una decoración y un estilo que se inspiran en las películas de El Padrino, el clásico de los años 70 con el que Francis Ford Copola llevaba al cine la novela de Mario Puzo del mismo nombre. En lo gastronómico, los restaurantes de la cadena ofrecen una variada carta llena de sabores, olores, colores y texturas inspiradas en la cocina italiana. Sobre la mesa, esto se traduce en pizzas y pastas al más puro estilo italiano pero también en platos cien por cien mediterráneos que ya cuentan con un buen número de adeptos en Sevilla. Es el caso de sus conocidos crepes, las ensaladas, los risottos, las virutas de foie, varios tipos de carpaccio, los huevos rotos o las carnes. Una carta, explica Arturo, "que cambiamos cada año después de llevar a cabo un estudio y una consulta con nuestros clientes". De hecho, La Mafia acaba de estrenar formato, el snack (a caballo entre la tapa y el plato) y nuevas recetas como el falso risotto, el caramelo de morcilla con pimiento del piquillo al Pedro Ximénez o el rotondo de pollo y verduritas asadas. En septiembre, además, tendrán nueva carta de postres.
Una de las claves de la cocina de La Mafia, explica Arturo Santos, es que "trabajamos las recetas desde el origen". Así, aunque las pastas, harinas, quesos, vinos o arroces proceden directamente de Italia y se elaboran en un obrador propio, los productos de temporada (verduras, aceites, hortalizas...) que se utilizan son los de la zona, aprovechando así lo mejor de cada tierra.
La buena acogida que La Mafia tuvo en Sevilla -fue la primera ciudad andaluza en acoger un establecimiento de la cadena- ha provocado que la firma se haya instalado en los últimos años en ciudades como Granada, Almería, Jaén, Jerez, Málaga o Córdoba. El tercer local de la capital andaluza, en pleno corazón de Nervión, cuenta con dos terrazas y una capacidad para unos 200 comensales.
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