Dónde comer y qué ver en Triana: los imprescindibles para disfrutar del barrio con más pureza de Sevilla

Triana es uno de los barrios con más historia y tradición de toda la ciudad de Sevilla

La laguna natural a hora y media de Sevilla que se ha convertido en la piscina más famosa de Andalucía Occidental

Puente de Triana
Puente de Triana / turismosevilla.org

Situado a orillas del Guadalquivir, en la margen derecha del río, se erige el barrio sevillano de Triana, uno de los lugares con más historia y encanto que más renombre tiene a nivel internacional.

Los orígenes de Triana se remontan a la era tartésica, momento en el que funcionaba como un núcleo pequeño de población asentada junto al río que ese momento era conocido como Betis. Este mismo lugar serviría, más tarde, como campamento de las legiones romanas gracias a su lugar estratégico entre Híspalis e Itálica, aunque no sería hasta la etapa árabe cuando se construiría un puente de barcas que lo uniría con el resto de la ciudad gracias a la mano de los almohades.

Durante los siglos XV y XVI el barrio de Triana adquiriría una importancia mundial debido a su situación, ubicado junto al río, y a su presencia en las expediciones marítimas que partían rumbo a América con su Escuela de Mareantes.

Tradicionalmente Triana ha sido un barrio de artesanos, marineros, alfareros y flamencos, en el que el arte y la tradición han estado muy presentes, consolidándolos como uno de los lugares más auténticos y con más encanto de toda la ciudad.

Dónde comer en Triana

Si algo tiene Triana entre sus calles, además de muchos rincones de gran belleza, son bares y restaurantes. En el barrio hay tanto lugares de tapas como establecimientos con comidas más elaboradas, sin dejar atrás las heladerías o las cafeterías. Algunos de estos negocios centran sus elaboraciones en la cocina tradicional andaluza y otros incluyen recetas más exóticas y vanguardistas.

Las Golondrinas

En lo que se refiere a tapeo y raciones tradicionales, una de las opciones más populares en Triana son las Golondrinas. Se trata de un bar ubicado en la calle Pagés del Corro cuya especialidad son los champiñones rellenos coronados con una salsa alioli casera. Además de esto también hay otras opciones como la carrillada ibérica o los calabacines, aunque ninguna de las tapas de su carta suelen defraudar.

Casa Ruperto

Casa Ruperto es famosa en toda Sevilla por sus pajaritos fritos, una tapa que en realidad se hace con codornices y que ha adquirido mucha fama entre los sevillanos. También hay otras opciones como pringá o caracoles y cabrillas en temporada.

La Cruz Tapas Bar

Con opciones tradicionales pero con un toque más vanguardista y una elaboración muy cuidada está La Cruz Tapas Bar, ubicado en la calle Farmacéutico Murillo Herrera. De aquí son especialmente famosas sus tapas de carrillera ibérica al Pedro Ximénez con crema de boniato y el taco de atún rojo, wakame, kikos y mayonesa de soja. Este bar es una de las mejores opciones para comer muy bien y probar sabores diferentes en el barrio de Triana.

María Trifulca

En lo que a restaurantes se refiere, María Trifulca es uno de los más conocidos tanto en Sevilla como fuera de ella no solo por su comida sino por el lugar en el que se encuentra: en pleno puente de Triana. En estas cocinas combinan los sabores tradicionales con las elaboraciones más originales y cuidadas. En su carta hay tanto aperitivos como croquetas has distintos tipos de carnes, pescado o marisco que no dejan indiferente a nadie.

Periqui Chico

Otro de los negocios conocidos del barrio de Triana es Periqui Chico, en este caso por ofrecer productos provenientes del mar. Si lo que se quiere es degustar un buen marisco o distintos tipos de pescados, esta es una opción con la que no se falla. Periqui Chico se encuentra en la calle Gustavo Bacarisas.

Qué ver en Triana

Pasear por las calles y plazas de Triana y empaparse del encanto de sus vecinos y vecinas ya puede ser, en sí mismo, un plan perfecto para visitar el barrio. Algunas de sus vías más famosas son la calle Betis, el callejón de la Inquisición, o la calle San Jacinto, por no hablar de los pantalanes que hay a pie de río, con unas vistas privilegiadas del puente de Triana, o de las calles llenas de naranjos del barrio de San Gonzalo.

En lo que respecta a edificios y monumentos, uno de los más famosos es la Parroquia de Santa Ana, conocida como la Catedral de Triana. También destacan la Capilla de la Virgen del Carmen, con una arquitectura muy particular, junto a la que se encuentra el Mercado de Triana, de gran belleza y tradición.

También merece la pena visitar la Capilla de los Marineros «Esperanza de Triana», la Iglesia de San Jacinto, la Capilla de la Estrella, el Museo de la Cerámica, La Parroquia de la O y La Basílica del Cristo de la Expiración «El Cachorro».

Triana es un barrio con alma propia. Sus habitantes, considerados trianeros antes que sevillanos, sus establecimientos de siempre, la vida de sus calles y su larga tradición lo convierten en uno de los lugares más mágicos de toda Sevilla, un lugar digno de visitar si se está en la ciudad.

stats