El Camino vuelve a alterar su rumbo en gran parte de esta etapa. En vez de continuar hacia el oeste, que sería lo lógico, vira en ángulo recto hacia el norte para atravesar la Sierra de las Cavernas y alcanzar el Valle del Tera, donde volverá a girar para seguir su curso normal hacia Santiago. 

La etapa entre Tábara y Calzadilla de Tera tiene 34 kilómetros de distancia, aunque se puede acortar pernoctando en Santa Marta de Tera (23 kilómetros). Si se para antes, hay que tener en cuenta que la siguiente jornada tendrá 36 kilómetros hasta Mombuey. Lo que no se camine hoy, lo andaremos mañana.

Para salir de Tábara, buscamos la Iglesia de Santa María y volvemos al sendero por el que accedimos a la población en la etapa anterior. Hay que seguir de frente por la pista de tierra hasta dar más adelante con las vías del AVE. Doblamos a la izquierda para cruzar la ZA-100 y después a la derecha para iniciar el Camino de Despeñaperros, que supera a los pocos metros el trazado ferroviario por un paso elevado.

Si salimos temprano de Tábara, el amanecer dejará una bonita luz en la llanura previa a la Sierra de las Cavernas.

El siguiente paso es superar dos cerros de la Sierra de las Cavernas que tenemos justo delante. Tampoco son subidas muy exigentes: el terreno se eleva unos 50 metros en un kilómetro aproximadamente. Todo esto por una pista de tierra bien definida.

La pista que atraviesa la Sierra de las Cavernas es amplia y cómoda.

Aproximadamente, a los 10 kilómetros de marcha, damos con una bifurcación. El trazado oficial va a la derecha, hacia Bercianos de Valverde, una pequeña aldea sin servicios. Si se sigue de frente, se alcanza Villanueva de las Peras que sí tiene albergue y bar. 

La Iglesia de San Pelayo será lo primero que veremos de Bercianos de Valverde.

Como preferimos seguir el trazado oficial, vamos a Bercianos. En la bifurcación vamos a la derecha y cuando veamos el primer camino a la izquierda, doblamos por ahí. A continuación, primer cruce a la derecha y segundo a la izquierda. Una recta larga nos hace cruzar la carretera ZA-P-1509 hasta llegar a otra intersección: vamos hacia las casas que vemos a la derecha, que es Bercianos de Valverde. La Iglesia de San Pelayo será lo primero que nos dé la bienvenida. Callejeamos por la Calle Mayor y doblamos a la izquierda por la Calle Eras hasta dejar atrás la aldea.

Salimos en busca del Arroyo Castrón y entre campos de cultivos seguimos varias pistas de tierra encadenando giros a izquierda, derecha, izquierda y derecha. Conectamos con el sendero que viene desde Villanueva de las Peras e iniciamos el fuerte repecho en curva por el El Tomillar. Si nos fijamos en las pareces del cerro, veremos que hay bodegas-cuevas en ella, una construcción típica de la zona.

En Santa Croya de Tera seguimos un agradable paseo fluvial.

A los pocos pasos, por fin, bajamos ya al Valle del Tera. Superamos el Canal de la Margen Derecho y pisamos asfalto en la ZA-120. Por su arcén llegamos a Santa Croya de Tera, localidad muy amena que se extiende a orillas del río con un bonito parque fluvial. El municipio tiene bares, tiendas y farmacias, pero no albergue. La posibilidad de pernoctar la tenemos a 1,5 kilómetros, en Santa Marta de Tera. Seguimos el paseo junto al río y cruzamos el curso de agua por un puente.

La imagen de la izquierda es considerada la escultura más antigua en España de Santiago Peregrino. Está en la puerta sur de la Iglesia de Santa Marta de Tera.

Muchas guías recomiendan parar en Santa Marta de Tera. No es mal lugar, aunque para la próxima jornada nos aguardarían 36 kilómetros. Su albergue municipal es muy bueno, pero en cambio no hay tiendas: si se necesita algo, hay que volver a Santa Croya. El mayor atractivo de esta localidad es la escultura de Santiago Peregrino en el pórtico de su iglesia románica. La consideran como la imagen de este tipo más antigua en España.

Tras Santa Marta de Tera, el Camino avanza junto al río (Imagen de 2021)

Tras visitar el templo, decidimos seguir caminando hasta Calzadilla de Tera unos 11 kilómetros más y así acortar el trayecto posterior hasta Mombuey. Tomamos la Calle Río rumbo al oeste y después Molino hasta dejar las casas atrás. A unos metros, salimos por el sendero que comienza a la izquierda. Iremos pegados al Río Tera durante un largo tramo. Todo está bien señalizado y bastante plácido.

A los 8 kilómetros de Santa Marta, llegamos a la playa fluvial de Camarzana de Tera. Es un lugar muy agradable para descansar, con un camping y un chiringuito cerca. El sendero conecta con la carretera y cruza el río por el puente. Justo después, pasamos al lado derecho de la cazada hasta la pista de tierra que arranca ahí.

Volvemos a cruzar el río por el puente que hay junto a la playa fluvial de Camarzana de Tera.

Seguimos avanzando por el otro lado del río otros 3 kilómetros hasta incorporarnos a la ZA-P-2547. Calzadilla de Tera, final de la etapa, está ya a la vista. La señalización del Camino nos desviará en cierto momento a la derecha junto a un canal de riego. Lo ignoramos y penetramos en la localidad directamente de frente por la carretera. El albergue está en la Calle de las Eras, a mano izquierda nada más entrar. Es el edificio que hay a la entrada, junto a un parque infantil. La llave la dan en el Ayuntamiento, aunque muchas veces está abierto.

Ruinas de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina, en Calzadilla de Tera.

En cuanto al patrimonio de Calzadilla, lo más interesante son las ruinas de la Iglesia de las Santas Justa y Rufina, de estilo románico. Mantiene una humilde espadaña y algunos elementos de su cuerpo principal. Hay una inscripción sobre el Camino Sanabrés delante del edificio.

La localidad  tiene tienda y farmacia, pero no cuenta con bar. Si queremos ir a uno, hay que acercarse a Calzada de Tera, justo cruzando el río.