Uno de los conjuntos arquitectónicos más célebres de toda la capital hispalense (y de toda Europa, por supuesto) es la Catedral de Sevilla, por sus impresionantes fachadas repletas de elementos escultóricos hipnóticos y sus interiores que acercan a quien tiene la suerte de visualizarlos al éxtasis religioso por su perfecta composición. 

Ahora bien, un monumento de estas características esconde infinitas historias y secretos que esperan ser descubiertos por los visitantes más atentos, secretos ocultos entre los preciosos elementos que combinan los estilos renacentista, almohade y mudéjar.

Como ya tratamos en una pieza realizada en colaboración con el licenciado y doctor en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla, José Luis González Munuera, este templo cristiano esconde simbología relativa al ideario masónico y hermético, incluso llegando a hacer referencia a evangelios apócrifos, escrituras judías e iconografía representativa del paganismo.

No obstante, en esta ocasión trataremos un pequeño elemento escondido en la Puerta del Perdón que, si bien es mucho más difícil de encontrar, no requiere de estudios ni conocimientos sobre la simbología, iconografía e iconología religiosa para poder observarlo al detalle.

La tercera mano de la Puerta del Perdón de la Catedral de Sevilla

En uno de los elementos escultóricos de esta sección de la fachada de la Catedral, más concretamente junto al relieve representativo de la expulsión de los mercaderes del templo por parte de Jesús, que hace referencia a San Pablo, se encuentra una tercera mano más allá de las dos que evidentemente forman parte del cuerpo de dicho santo, como si estuviera sujetando esta escultura que adorna la fachada de la famosa Puerta del Perdón.

El motivo de esta tercera mano es, aún hoy en día, un auténtico enigma incluso para los más reputados expertos en escultura, arquitectura y arte en general. Sin embargo, cuenta la leyenda que aquellos que son capaces de encontrar esta tercera mano se casan en la Catedral. 

¿Crees que podrás conseguir ubicar este misterioso elemento anatómicamente anómalo en tu próxima visita a este famosísimo templo? Quizás marque definitivamente tu futuro emocional y haga que el día más importante de tu vida pase por el interior de la Catedral hispalense...