Sin apenas haber tenido contacto con sus compañeros, Ben Woodside, la última incorporación del Baloncesto Sevilla, se subirá mañana al avión para viajar a Santiago, donde podría debutar ante el Obradoiro. Al menos si así lo considera oportuno Scott Roth, ya que el norteamericano, con pasaporte georgiano, pasó en el CEAR de la Cartuja un reconocimiento quizá más pertinentes que nunca. Y es que el de Minnesota se operó en verano de una dolencia en la cadera derecha, después de ser descartado por el TED Ankara -anunció su fichaje a principios de julio- al no superar los exámenes médicos.

Tras pasar por el quirófano para revertir una lesión que le causaba molestias para jugar, Woodside, que no juega desde el pasado abril, se ha ejercitado continuamente en su país para recuperar su mejor estado de forma ante la posible llamada de algún otro club. De hecho hasta hace unas semanas en Italia se rumoreaba con la posibilidad de que recalase en el Caserta, pero el Baloncesto Sevilla se adelantó. El nuevo base del conjunto hispalense jugó el año pasado en Italia, en el Vanoli Cremona, con el que se perdió el último mes de competición por un golpe en la rodilla y molestias musculares en la zona de la pantorrilla.

Woodside, que demostró en las instalaciones del CEAR encontrarse en un buen estado físico, se mostró feliz por su fichaje con la entidad sevillana y aseguró sentirse "encantado y emocionado de firmar con este club". "Estoy deseando encontrarme con mis compañeros y mi nuevo entrenador. Vengo a dar lo mejor de mí", aseguró el protagonista en declaraciones facilitadas por la entidad, en las que explicó que ya conoce a Roth por una experiencia previa: "Scott fue mi entrenador durante una liga de verano (con los Golden State Warriors). Creo que es una gran persona y un gran entrenador y vengo dispuesto a darle lo mejor de mí".

"Llevo mucho tiempo jugando y tengo una amplia trayectoria como base y liderando el juego. No vengo a cambiar nada, sino a aportar mi experiencia en la posición de base", apuntó el estadounidense, que se mostró positivo sobre las posibilidades del Baloncesto Sevilla: "Los equipos mejoran día a día durante el año entero, por eso siempre hay que continuar trabajando sin importar las circunstancias. Puedo enseñar a mis compañeros más jóvenes y ayudarles a crecer en comprensión de juego", indicó.