La historia de Container-Art, el proyecto que nació para fomentar el diálogo con lo contemporáneo junto al Guadalquivir, escribe estos días su último y más triste capítulo. El atractivo espacio formado por contenedores de mercancías y situado en el Muelle de las Delicias no seguirá programando exposiciones, tal como anunció ayer en su cuenta de Facebook Verónica Álvarez, una de las responsables, junto con Carmen Carmona, de esta singular galería. "Debido a la falta de apoyo e interés, a los numerosos problemas suscitados, y a la toma de decisión por parte de la Autoridad Portuaria de Sevilla, de promover este espacio sólo para un uso concreto (sin definir) el proyecto y la sala como tal se cierran", lamentaba Álvarez.

Container-Art abrió sus puertas el pasado abril con una exposición que reunía a algunos de los creadores más sobresalientes de la ciudad -Félix de Cárdenas, Manolo Cuervo, Manuel Salinas o Javier Buzón-, pero la propuesta, planteada no sólo para atraer a los sevillanos interesados en el arte sino también a los turistas que desembarcaban en el río, no ha podido llegar al año de vida. Según Álvarez, la Autoridad Portuaria no les renueva la concesión administrativa. En estos meses, Container-Art había "arrastrado a mucha gente" a cada inauguración y llamado la atención de cadenas internacionales como "la televisión holandesa y el Canal Arte francés. Incluso un profesor de la Universidad de Berlín nos ponía como ejemplo de innovación en una ciudad tradicional como ésta", cuenta la galerista y gestora de otra propuesta dedicada a la creación en la sierra, ValdelArte. De poco han servido esas conquistas: "La apuesta de ellos va por otro lado, la cultura no les interesa", concluía ayer Álvarez con desánimo.