Apenas le bastaron ocho minutos a Dorlan Pabón para desempeñar un rol decisivo en el partido ante Osasuna. Y es que el colombiano se inventó una asistencia perfecta al espacio para que Rubén Castro, con un desmarque también de mérito, se plantara solo ante Andrés Fernández. Poco después, el colombiano se retiró lesionado, al sufrir una fuerte entrada de Arribas, que lo dejó casi sin aire.

El cuerpo médico le realizó ayer al delantero una serie de pruebas para determinar el alcance exacto de la dolencia y descartar un contratiempo mayor, pese a que Pabón se despertó ayer con la zona muy dolorida. Finalmente, los médicos confirmaron que sufre una contusión en la costilla flotante derecha, que fue lo que le provocó ese fuerte dolor que le impidió seguir en el terreno de juego para los minutos finales del partido.

Pese a todo, tanto el cuerpo médico como el propio delantero confían en que la evolución sea positiva en las próximas horas, con el tratamiento que se le ha impuesto para rebajar el dolor, y que Pabón pueda participar en el entrenamiento de mañana del equipo. El colombiano arrastró unas molestias en los isquiotibiales la pasada semana, lo que lo dejó en el banquillo en el duelo ante Osasuna, por lo que el descanso también le vendrá bien para dejar atrás esa dolencia y entrenarse a tope de cara al encuentro del próximo sábado ante el Valencia en Mestalla.