El Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) en Sevilla ha solicitado al alcalde, Juan Ignacio Zoido, que aumente la dotación de personal en la sala de control para poder cubrir con garantías la puesta en marcha del nuevo teléfono de emergencias 092. En un escrito dirigido al alcalde, al que ha tenido acceso este periódico, el presidente del Sppme en Sevilla, Manuel Bustelo, pide también que "se forme a los nuevos policías que se utilicen para atender las llamadas, así como que se adecuen las instalaciones y medios técnicos al aumento de puestos de trabajo que se va a necesitar".

El sindicato mayoritario en la plantilla de la Policía Local de Sevilla expone al alcalde que "por todo el mundo es sabida la precaria situación en la que se encuentra actualmente el centro de control con instalaciones y medios técnicos deficientes y falta de personal". El escrito de la central sindical añade que el personal que presta servicio en la sala es "a todas luces insuficiente" para atender una nueva línea de teléfono, lo que "derivará en un mal servicio para el ciudadano". El sindicato se ha mostrado abiertamente a favor de la implantación del 092 en numerosas ocasiones, si bien estima que el servicio ha de prestarse con garantías y no simplemente colocando dos policías a atender llamadas telefónicas, sin haber recibido instrucción alguna de cómo cribar y distribuir los avisos.

Por el 092 entrarían llamadas de todo tipo, tanto relacionadas con la seguridad ciudadana como con problemas de tráfico -accidentes, doble fila, aparcamientos en zonas prohibidas- y con el cumplimiento de las distintas ordenanzas municipales, desde los gorrillas hasta los problemas generados por el ruido o la movida. Fuentes sindicales consideran que sería necesario una formación a aquellos policías que se encarguen de recibir estas llamadas, al tiempo que lamentan que el nuevo centro de control siga acumulando retraso y los agentes lleven casi cuatro años funcionando con una sala provisional que no cumple con los requisitos adecuados.

En varias ocasiones la sala de control actual se ha visto afectada por distintos apagones que ha sufrido la Jefatura, un edificio inaugurado tras la llegada de Zoido a la Alcaldía pero construido durante el mandato anterior. Estas interrupciones del suministro eléctrico han provocado que los policías se quedaran, a veces durante más de una hora, sin información de lo que ocurría en el resto de la ciudad. A estos fallos se unen los frecuentes que sufren las transmisiones de la Policía Local, que padecen problemas de cobertura en algunas zonas de la ciudad.