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Los sevillanos pagan 500 euros más en servicios funerarios desde 2012

  • El sector exige volver al IVA reducido. El número de fallecimientos se redujo en casi 500 durante 2013 en la provincia.

Morirse se ha convertido en un lujo. Los servicios funerarios se han encarecido notablemente los dos últimos años, desde que se aplica un nuevo tipo de IVA que incrementa en 13 puntos al anterior. La subida, cifrada en una media de 500 euros, ha perjudicado a las empresas del sector, que han comprobado cómo sus ingresos han disminuido al prescindir muchas familias de servicios auxiliares. Al nuevo tipo impositivo se suma la bajada generalizada de las defunciones, que en la provincia se contabilizó en casi 500 óbitos menos.

El sector funerario había resistido los envites de la crisis hasta que en 2012 el Gobierno cambió el tipo impositivo para dicho negocio, que pasó del reducido (8%) al general (21%), 13 puntos más que han tambaleado las cifras de ingreso de muchas empresas, con una reducción generalizada del 15%. Esta situación ha provocado, incluso, que se tensara la relación entre la patronal y los trabajadores, un enfretamiento que a punto estuvo el pasado junio de saldarse con una huelga en los tanatorios. Finalmente, por mediación del Sercla, el paro se desconvocó, aunque los empresarios siguen advirtiendo de la dificultad de mantener una plantilla con el descenso de la facturación.

El coste medio de un fallecimiento en Sevilla -según fuentes del sector- es de 3.000 euros, desembolso que incluye los servicios mínimos como coche, ataúd y tanatorio. Este precio se ha encarecido entre 400 y 500 euros desde que se aplica el nuevo IVA, lo que ha llevado a que muchas familias prescindan de otros servicios como la esquela, las coronas de flores o buscar, entre los imprescindibles, los más baratos, como en el caso de los féretros.

No es para menos, puesto que con el nuevo tipo impositivo España se ha convertido en uno de los países donde morirse resulta más caro. Eduardo Vidal, vicepresidente del Grupo Mémora (propietario del tanatorio de la SE-30), explica que en el resto de Europa hay 8 países donde los servicios funerarios están exentos de impuestos; 4 donde se sitúa en el tipo general -como en España-, 4 en tipo reducido y uno como tipo superreducido.

Al encarecimiento tributario se une la bajada en las defunciones que se produjo el año pasado en toda España. En concreto, según detalló este lunes la patronal Panasef, en la provincia de Sevilla se registraron 465 fallecimientos menos que en 2012, con lo que se rompe la trayectoria alcista de los ejercicios anteriores. Así, en 2009 hubo 14.574 defunciones, cifra que un año después se incrementó hasta los 14.614 fallecimientos. En 2011 se llegó a los 14.747 y en 2012 se produjo el mayor incremento, hasta los 15.099. El año pasado se produjo el primer receso, con 14.634. Los meses en los que más sevillanos murieron fueron los de invierno: enero (1.445) y diciembre (1.395).

Pese a la crisis que afecta al sector, hay empresas, como el Grupo Mémora, que siguen ampliando su carta de servicios funerarios. La última novedad consiste en enviar las cenizas del finado en globo sonda de helio a la estratosfera por un coste que oscila entre 3.000 y 4.000 euros.

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