La ciudad de los retrasos

Que Sevilla abarca mucho y aprieta bien poco es más que evidente por la cantidad de grandes obras en marcha (17) para las que no se vislumbra un final cierto (el colmo fue la autovía de Utrera que se terminó de hacer el año pasado tras 18 años) y por el reguero de proyectos aprobados (18) que los políticos anuncian año tras año en las páginas de la prensa local sin una traducción real. La consecuencia de esta situación es el aburrimiento ciudadano, que acaba por concluir que en Sevilla lo que se empieza no siempre se acaba.

Este periódico ha recopilado una lista de 35 proyectos y obras pendientes de monumentos, zonas verdes, infraestructuras de turismo, de negocios, de ocio, de transporte y de agua, edificios administrativos, religiosos y singulares, aparcamientos y peatonalización de calles cuyo problema de fondo más común es la falta de presupuesto; le siguen, como segunda causa del retraso, las dificultades técnicas o urbanísticas surgidas en la ejecución de los trabajos y, en último lugar, la conveniencia política.

La escasez de dinero, por ejemplo, figura detrás de los problemas que han retrasado 17 proyectos u obras: la restauración del monumento de la Plaza de España, la ampliación del Palacio de Congresos de Sevilla, la construcción del Acuario del Muelle de las Delicias, las conducciones del pantano de Melonares que han de llevar a la capital agua de la presa, el edificio administrativo y de oficinas del Prado de San Sebastián, la construcción de la nueva esclusa del Puerto y el dragado del río, la reutilización del edificio del Telecabina, y la restauración de once zonas verdes ligadas a los cauces fluviales de la ciudad.

Hay cuatro casos en los que a la falta de fondos se suma la dificultad técnica o urbanística de encajar ese plan en un suelo concreto de la ciudad. En este apartado habría que incluir la Torre Cajasol de Puerto Triana, la ampliación del tranvía a San Bernardo/Santa Justa, el traslado de la Feria de Abril con más casetas al Charco de la Pava y los 19 aparcamientos de residentes prometidos por el gobierno de Monteseirín en todos los distritos. En definitiva, que la causa económica sola o combinada con el obstáculo técnico ha afectado al 60% de las obras o proyectos pendientes (21).

Las dificultades técnicas (de ingeniería o urbanísticas relacionadas con el suelo) han frenado claramente la ejecución de seis iniciativas más: el proyecto de las setas de la Encarnación (Metropol Parasol), la línea 1 del Metro de Sevilla, la Ciudad de la Justicia, el traslado de Mercasevilla a los terrenos de Majarabique, la construcción de la mezquita de Sevilla y la peatonalización del entorno del Palacio de San Telmo (la obra está pendiente de que acabe el Metro en Puerta de Jerez).

En proyectos fundamentales para las comunicaciones de Sevilla y su área metropolitana, como la segunda ronda de circunvalación SE-40 y el Cercanías del Aljarafe Norte, las motivaciones han sido puramente de conveniencia política. La misma razón está detrás del botellódromo previsto en la bancada de la Expo -los suelos inundables de la isla de la Cartuja-, de la peatonalización de la calle Asunción de Los Remedios y de la Plaza de la Libertades de Santa Justa proyectada para cubrir las vías del tren.

Si atendemos al criterio de las 16 obras en marcha, la que acumula más años de espera, y sin duda bate récords, es la restauración del monumento concebido por el arquitecto Aníbal González para la Exposición Universal de 1929, unos trabajos que duran ya diez años. Su recuperación arrancó en 1999 con alumnos de sucesivas escuelas taller y, tras unos años sin actividad, las administraciones preparan en la actualidad su recuperación definitiva (balaustradas de cerámica, la ría, la plaza central, los jardines y avenida de acceso) para finales de 2010.

Sin contar los antecedentes de las obras hasta 1986, la línea 1 del Metro es la segunda más demorada, ya que su inauguración estaba prevista para junio de 2006 y a estas alturas los trabajos siguen en marcha. Se espera que la mayor parte de los 18 kilómetros de la línea se abra antes del verano, sin contar Puerta de Jerez, Guadaíra y Montequinto. El acuario de las Delicias y la ampliación del Palacio de Congresos (Fibes) constan en tercer y cuarto lugar en el ranking. El acuario debió acabarse en tres años (junio de 2007), pero graves problemas presupuestarios mantienen los trabajos paralizados; el Puerto rescató la concesión a finales de 2008 sin que se sepa qué nueva empresa lo rematará.

La ampliación de Fibes viene gestándose desde 2000 pero no ha sido hasta enero de 2008 cuando empezó la construcción con una inversión de 66,5 millones del Ayuntamiento, la Junta y la Diputación.

En quinto lugar figuran los aparcamientos subterráneos de residentes. Al menos diecinueve deberían estar concluidos desde mayo de 2007 coincidiendo con las últimas elecciones municipales. Se licitaron en verano de 2006 con menos de un año de ejecución, pero hasta la fecha sólo se ha entregado uno, en la avenida de Coria. Tampoco hay noticias de los parkings de rotación previstos en la periferia del casco histórico.

La sexta posición en la lista de los proyectos eternos es para las setas de la Encarnación (Metropol Parasol) que arrancaron en 2006 con la previsión de inaugurar los parasoles centrales y el nuevo mercado de abasto en el verano de 2007. Ahora el Ayuntamiento ha presionado a la constructora para que entregue la obra de una vez de finales de 2009 a inicios de 2010.

Otros trabajos en ejecución que debieron haber concluido hace años son la segunda ronda de circunvalación SE-40, el rascacielos de Cajasol del proyecto Puerto Triana (Cartuja) y la nueva esclusa del Puerto, cuya planificación comenzó hace una década.

La nueva esclusa ha de estar lista a finales de este año, tras unas obras de construcción que comenzaron en el verano de 2005. La apertura de la segunda ronda está prevista para 2012; las obras del primer tramo arrancaron en mayo de 2007. La Torre Cajasol (diseñada por César Pelli) se inaugurará en la primavera de 2012 después de más de tres años de obras que se iniciaron en septiembre de 2008 con movimientos de tierra. Aún no es visible la estructura del rascacielos.

La lista de las obras en ejecución pendientes de apertura se cierra con once parques fluviales y reformas de riberas cuya reforma conveniaron en 2003 la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y el Ayuntamiento de Sevilla. Hasta ahora están en ejecución el Muelle de Nueva York (frente a Los Remedios) y los parques del Charco de la Pava, Jardín Americano (margen derecha hasta el Alamillo), Palmas Altas-Cortijo de Cuarto y la ribera del río Guadaíra. Según la Confederación, en el parque Guadaira han surgido problemas con las obras por la aparición de "servicios afectados no identificados" cuyo desvío suponía un aumento excesivo del presupuesto. Por ello la obra se licitará de nuevo en verano, aunque lo ejecutado se reaprovechará. La reforma de la ribera de San Jerónimo también está paralizada a la espera de que el proyecto se redefiniera con Urbanismo, lo que ha sucedido ya. El parque del Tamarguillo está prácticamente terminado pero le queda el mobiliario urbano; el Ayuntamiento sitúa su apertura definitiva en enero de 2010. Aún no tienen fecha de inicio la reforma de la ribera de la calle Betis (Santa Telmo-Triana) ni el parque Ranilla ni el nuevo cauce del Tamarguillo.

Para ser justos, también hay iniciativas que se han cumplido y funcionan, como el tranvía, el carril bici y las bicis públicas, pero lo habitual es que eso no suceda con los grandes proyectos.