Después de salvar los escollos iniciales provocados por algunas contradicciones detectadas en el PGOU, Urbanismo ha dado luz verde para la construcción en la avenida de Eritaña de la sede de la Fundación de Investigación de la Universidad de Sevilla, un edificio diseñado por el propio arquitecto de la Hispalense, Miguel González Vilches, en el que se invertirán más de 4 millones de euros.

La construcción de la nueva sede, entre el pabellón de México y el cuartel de la Guardia Civil, supondrá una nueva entrada al Parque de María Luisa desde la avenida de Eritaña, resolviéndose así una "carencia histórica", según ha manifestado a este periódico el vicerrector de Infraestructuras de la Universidad de Sevilla, Antonio Ramírez de Arellano. "Todos nuestros edificios son de acceso libre para los ciudadanos. Además, pretendemos abrir una cafetería con veladores en el flanco del solar que da directamente al parque".

La nueva sede de la Fundación de Investigación tendrá unos 3.000 metros cuadrados construidos (similar al edificio del pabellón de México) que acogerán sobre todo las dependencias de la institución, pero también aulas para algunas titulaciones propias de la Universidad de Sevilla. En la actualidad, los técnicos de la Hispalense están finalizando la supervisión del proyecto de ejecución, por lo que Ramírez de Arellano estima que el inicio de las obras es "inminente". Teniendo en cuenta que la previsión es que los trabajos de construcción duren como mucho 12 meses, la previsión de Ramírez de Arellano es que la Fundación de Investigación (que canaliza las relaciones entre la Universidad y las diferentes empresas) esté finalizada a finales del presente año 2011 ó principios de 2012 como muy tarde. La empresa adjudicataria de las obras ha sido la constructora malagueña Sando.

Como ya se indicó en su día, el nuevo inmueble de la Universidad de Sevilla (con el que se continúa el ambicioso plan de infraestructuras de la institución) pretende tener como virtudes principales la transparencia y la poca altura, todo lo cual facilitará la integración del mismo en un entorno tan delicado como son las inmediaciones del Parque de María Luisa (recientemente, la Consejería de Cultura paralizó la obra del parque infantil de tráfico municipal porque su excesiva altura suponía una agresión visual a la histórica zona verde sevillana).

La construcción de este edificio supondrá también la configuración en el extremo sur del Parque de María Luisa de una importante zona de gestión universitaria, pues estará prácticamente unido a los pabellones de México y de Brasil, también propiedad de la Hispalense.