Siete de cada diez pacientes crónicos y el 80% de los profesionales de la salud estarían dispuestos a utilizar la telemedicina si estuviera a su alcance, según el informe Gestión Remota de Pacientes: Un estudio sobre las percepciones de pacientes y profesionales en España, elaborado por la escuela de negocios IESE y Telefónica. Se trata del primer estudio de este tipo realizado en España y recoge la opinión de casi 1.800 personas entre enfermos crónicos (hipertensión, diabetes, cardiopatías y enfermedad pulmonar obstructiva crónica o EPOC) y profesionales médicos de todo el país (médicos de cabecera, especialistas y enfermeros) tanto del sector público como privado.

A través del uso de la tecnología, la telemedicina o Gestión Remota de Pacientes (GRP) es un sistema que permite a los pacientes controlar su estado desde su hogar y compartir los resultados en tiempo real con su médico. Aunque los profesionales de la salud están familiarizados con el término GRP, solo un pequeño porcentaje conoce exactamente en qué consiste y la utiliza actualmente y los médicos (31%) son los menos informados. El conocimiento era incluso menor dentro del sector privado.

En la actualidad, sólo un grupo reducido de profesionales (entre un 3% y un 11%) y de pacientes (7%) utilizan habitualmente estos sistemas. Los principales beneficios se asocian a la mejora de la calidad de la atención, a la detección precoz de cambios en las afecciones crónicas y a la mayor responsabilidad de los pacientes en su atención. Además, se trata de una tecnología muy útil para ahorrarles tiempo y visitas al hospital.

Pero la telemedicina también despierta recelos. Precisamente esta falta de contacto con los médicos es la principal preocupación de los pacientes, si bien la mayoría se sentiría cómoda utilizando una videoconferencia. Otra de las principales conclusiones del estudio, en lo que coinciden tanto los pacientes como los profesionales, es que aunque son mayoritariamente favorables al uso del sistema GRP, es necesario ofrecer más información para facilitar su aplicación. Otra de las claves para su éxito sería que los médicos, como fuente creíble que son para los pacientes, ayudaran a éstos a iniciarse en el sistema.

A partir de estas conclusiones, el estudio ofrece varias recomendaciones para la introducción eficaz de la telemedicina.  El primer paso es ofrecer un acceso claro, relevante y transparente al sistema GRP. A esto contribuiría dar a conocer los resultados de experiencias exitosas en distintas regiones y sectores para motivar su utilización. En esta campaña informativa sería importante el papel del Ministerio de Sanidad.