La española Maider Unda no pudo ganar la medalla de bronce en la categoría de -72 kilos de lucha femenina de los Juegos Olímpicos de Pekín 2008, tras perder ante la polaca Agnieszka Wieszczek.

La alavesa debutó en el torneo con un triunfo ante la ucraniana Oksana Vashchuk, pero en cuartos no pudo con la búlgara Stanka Zlateva, lo que le hizo pasar a la repesca para, al menos, optar a un tercer puesto.

Tras superar a la canadiense Ohenewa Akuffo, Unda accedió a la pugna por uno de los dos bronces en juego, pero no pudo con Wieszczek, muy superior en el combate y que no dio opción a la española.

La luchadora española Maider Unda es una granjera cuyo ritmo de vida está adaptado al de sus animales. Tiene ovejas, gallinas, caballos salvajes y ayer estuvo a punto de tener también un bronce olímpico, pero su cuerpo de gladiadora acabó destrozado, el único consuelo era que España había estado pendiente de su combate. Aun así gritó: "¡Animadme!".

A pesar de su agotamiento, Maider acabó "satisfecha" por haber sido la carta de presentación de la lucha libre en España, que no soñaba con conseguir una medalla en una disciplina que es olímpica en mujeres desde Atenas 2004. Muchos aficionados al deporte estaban pendientes ayer de su combate y ése fue su único "consuelo" tras la derrota.

Maider Unda nació hace 31 años en Vitoria, pero actualmente vive en Olaeta. La casa de piedra de sus padres es su lugar de trabajo y ayer estuvo a punto de ganar un bronce y cambiar los quesos denominación de origen Idiazabal por un metal en los Juegos Olímpicos de Pekín.

A pesar de haber cursado estudios de electrónica, Unda es una gladiadora. Mide 1,77 metros y aparenta la dureza de una roca, pero esta tarde acabó derrotada, con la cara arañada y llena de golpes. Hablaba completamente exhausta nada más acabar la pelea ante la polaca Wieszczek: "Es muy importante haber tenido al país pendiente de todo esto".

"La lucha no es fácil, tenemos becas pero en España no hay tradición y levantar la lucha femenina en España ha sido muy duro", señaló la luchadora vitoriana.