El presidente de Telefónica, José María Álvarez-Pallete, resaltó ayer la importancia del liderazgo que España y Andalucía tienen en el despliegue de redes de fibra óptica y señaló ésta como una oportunidad de éxito en la economía digital.

Durante su participación en una mesa redonda celebrada en el paraninfo de la Universidad Pablo de Olavide, el primer ejecutivo de la multinacional de las telecomunicaciones defendió la política de inversión en infraestructura que su empresa ha desarrollado en los últimos años, incluso “en mitad de la crisis”. En España, según destacó, en septiembre pasado había más de 22 millones de hogares con acceso a internet de alta velocidad mediante redes de fibra óptica, lo que le sitúa en segundo lugar, solo superada por Suecia, aunque líder en número de clientes en Europa que disponen de esta tecnología. Ese liderazgo se cumple en el ámbito de Andalucía, donde sólo Telefónica ha invertido más de mil millones de euros en los últimos cinco años en despliegue de fibra óptica, lo que la ha permitido tener cobertura en el 50% de la población, que supone tener más capacidad en esta tecnología que el conjunto del despliegue en Francia, Italia, Alemania, Reino Unido y Bélgica. A ello se une al 94% de cobertura 4G, la red de datos a alta velocidad para dispositivos móviles, lo que también le sitúa como región líder en cobertura LTE.

Para Álvarez-Pallete esta capacidad de red da la comunidad autónoma una oportunidad de éxito para la economía digital. Por ello se mostró muy orgulloso de la estrategia inversora de la compañía que preside y de la que antes fue su consejero delegado, porque argumentó, fruto de ser referente en el sector “operadores como Orange tienen desplegada más fibra aquí que en Francia, o Vodafone más internet de alta velocidad que en Reino unido, sus países de origen”.

El presidente de Telefónica puso de manifiesto los vertiginosos avances que está generado la era digital y puso el acento sobre la necesidad de proteger la privacidad tanto como en la vida analógica. Así defendió la necesidad de dotar de una Constitución Digital para proporcionar la protección de los datos, “que son el petróleo del siglo XXI”, de cara a que estén “sometidos a la soberanía de los países y de los individuos”.Insistió el primer ejecutivo de Telefónica que todos estos avances han creado negocios disruptivos que han acabado con otros tradicionales. Puso de manifiesto que hasta 1955, una empresa tenía de media 61 años de vida y que, en 2015, esa cifra ha descendido hasta los 17 años. Su conclusión es clara: el debate ya no es si una empresa debe digitalizarse o no, sino a qué ritmo se digitaliza. Llegó a señalar que pasar a la era digital es una “cuestión de supervivencia” para las compañías.

José María Álvarez-Pallete, con los asistentes a las mesa redonda en la UPO.

Además de la privacidad, el directivo hizo hincapié en la necesidad de dotar de reglas de juego que ahora no existen respecto a negocios disruptivos, “de ahí que haya conflictos entre los taxistas y Uber”, dijo como ejemplo. Porque estamos ante una “economía de las plataformas”, en la que “la mayor compañía de taxis, la propiaUber, no tiene un solo coche; el mayor dueño de contenidos del mundo, Facebook, no los genera; los minoristas más valorados, Alibaba o Amazon, no tienen inventarios, o la empresa que más camas ofrece para a alojarse en un viaje, Airbnb, no posee ninguna en propiedad”.

Álvarez-Pallete participó en la mesa redonda Dirigir una empresa: una carrera de valores, organizada por la Universidad Pablo de Olavide, Cesur, Telefónica y el Grupo Atento Inversiones, cuyo presidente, Rosauro Varo, también intervino como ponente.

Varo incidió igualmente en las oportunidades de futuro que ya da la era digital y que serán exponenciales en el futuro gracias a fenómenos como el internet de las cosas. El presidente de GAT Inversiones también abogó por que en España se dé más valor al fracaso como experiencia en el mundo del emprendimiento.

Rosauro Varo reveló al auditorio de estudiantes y empresarios que les escuchaban que, después de vender Pepephone, su compañía y la dueña del otro 50% han invertido en Telefónica, de la que han adquirido cinco millones de acciones. Y explicó el porqué: “Conocemos el proyecto de transformación tranquila y firme, el marco regulatorio –que no puede ser más desfavorable pero con un desequilibrio que tenderá a equilibrarse– y las personas que lideran el proyecto. Telefónica tiene un equipazo”.

La mesa estuvo moderada para el profesor y director del máster de Finanzas y Banca de la Universidad Pablo de Olavide, Enrique Jiménez.