El Ayuntamiento de Sevilla, a través del Zoosanitario Municipal y el Área de Parques y Jardines, ha puesto en marcha por vez primera un sistema de control biológico de roedores con la instalación de cajas nido para aves rapaces nocturnas y autóctonas en diferentes zonas verdes de la ciudad.

"Ese control biológico ya se realiza con halcones peregrinos en ésta y otras ciudades españolas contra las palomas que invaden los espacios patrimoniales e incluso para garantizar la seguridad aérea ahuyentando a las aves en entornos aeroportuarios", explicó ayer el delegado de Bienestar Social y Empleo, el socialista Juan Manuel Flores, en un comunicado.

En concreto, el Centro Zoosanitario Municipal ha elaborado un estudio ecológico y de diagnosis medioambiental de las rapaces nocturnas en la capital sevillana con el objetivo de fomentar el asentamiento de aves como la lechuza común (Tyto alba), el cárabo (Strix aluco), el búho chico (Asio otus), el mochuelo (Athene noctua) y, por último, el autillo (Otus scops) y que contribuyan de manera natural a la lucha contra plagas de roedores, reduciendo así el uso de biocidas.

Para ello, se instalarán en total 32 cajas nido para las rapaces nocturnas, la mayoría de ellas en los diferentes parques de la ciudad.

Así, 29 estarán en parques de dimensiones superiores a las 20 hectáreas, como son los parques del Alamillo, Tamarguillo, Vega de Triana, Miraflores, Sevilla Este, Guadaíra, Infanta Elena y María Luisa, y las tres restantes se ubicarán en suelo urbano.

"En suma, se lucha de manera natural contra los roedores, aumenta la biodiversidad en la ciudad y se actúa de forma más respetuosa con el medio ambiente", según concluyó el edil Juan Manuel Flores. La instalación de esta treintena de nidos se irá completando a lo largo de este mes.