El debate sobre la futura creación de la gran caja andaluza, fruto de la fusión de Unicaja y Cajasol, continúa encallado cuando se discute qué capital debe contar con la sede principal de la entidad financiera resultante.

El alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, dio por hecho ayer que será ésta la ciudad elegida. Monteseirín subrayó que la futura caja única "debe estar en la capital de Andalucía por miles de razones", y afirmó que "no hay nada que discutir ni cuando llegue el momento ni ahora".

Mientras, sus compañeros socialistas en Málaga están promoviendo mociones en los ayuntamientos de esta provincia para reclamar que la sede se sitúe en la capital malagueña, a pesar de que la ejecutiva regional del PSOE pidió a los dirigentes provinciales que no entren en la polémica para evitar que los debates localistas impidan, una vez más, un proceso de fusión de las cajas de ahorro.

El portavoz del grupo socialista en el Parlamento andaluz, Manuel Gracia, manifestó ayer en la capital malagueña que nadie cuestionará, cuando llegue el momento, la objetividad de la preferencia de Málaga para tener el núcleo central de la gran caja.

El portavoz reconoció que es lógico el debate público generado acerca de si la sede debe ubicarse en la Costa del Sol o en Sevilla, "ya que cada uno defiende sus intereses". Gracia destacó que esta discusión no debe utilizarse "fuera de la realidad" y que serán las cajas las que deberán decidir llegado el momento. El socialista dijo que utilizar este debate puede otorgar un beneficio político a corto plazo y "tener un efecto funesto para la sociedad".