Frente a los que "enredan", frente a los que desean hacer de la política "una hoguera de las vanidades" y un "talent show de megalomanías", Pablo Casado ha pedido al PP que no caiga en los "personalismos", que con el PSOE ya hay bastante. El líder nacional de los populares ha clausurado el congreso de su partido en Granada con una respuesta a la persona que lo ha marcado desde el viernes: Isabel Díaz Ayuso, la presidenta de la Comunidad de Madrid. "Juanma Moreno siempre ha tenido las manos libres para poner la fecha de las elecciones", ha indicado Casado, que además ha reivindicado su participación en el cambio andaluz.

Los "solistas" a los que Casado se refiere han sido señalados por Génova, son Miguel Ángel Rodríguez, asesor áulico de Díaz Ayuso; Cayetana Álvarez de Toledo, su anterior portavoz en el Congreso, y Esperanza Aguirre, quien en 2008 lideró una rebelión similar contra Mariano Rajoy en el congreso de Valencia. 

Pablo Casado ha explicado que él nunca, o casi nunca, ha hablado con Juanma Moreno sobre la fecha de las elecciones andaluzas. Sólo en una ocasión, cuando se presentó la moción de censura en Murcia, conversó con el presidente de la Junta. "La tarde de ese miércoles, desde mi despacho del Congreso de los Diputados, le dije a Juanma que hiciese lo que entendiera, que sería bueno, porque pondría el interés de los andaluces por delante del partido", aseguró Casado.

"Además -siguió sobre esto-, me da lo mismo cuándo se celebren, porque Juanma obtendrá o una mayoría aplastante, o absoluta o le votarán todos los andaluces (...) El camino de Moncloa pasa por San Telmo". 

Sus problemas con Isabel Díaz Ayuso, a quien el mismo Casado promocionó como candidata en Madrid, comenzaron con esa moción de censura de Murcia, porque Génova no quiso que se convocasen comicios anticipados en esa comunidad. Después fue un éxito para el PP, porque arrinconó a Vox y sentención a Ciudadanos, pero Díaz Ayuso ha venido a rentabilizar su éxito: quiere ser presidenta del PP de Madrid, y Génova no quiere. Pero, además, lo que la dirección nacional cree es que Díaz Ayuso quiere competir con Casado por el liderazgo en España.

Casado también ha reivindicado su papel en las elecciones andaluzas de diciembre de 2018. Recién llegado al liderato, se embarcó en la campaña andaluza. "Hice 75 actos, y aquí, en Granada, una tarde de mucho frío, hasta me tuve que inyectar Urbason para poder hablar", indicó el líder nacional, también cuestionado en el PP andaluz.

El partido de Moreno no es un opositor de Casado, pero ambos sí han cruzado batallas en Andalucía. La más importante fue la del PP de Sevilla, donde finalmente ganó la apuesta de Génova. Las relaciones entre los dos líderes no son malas, pero sí las del secretario general del PP, Teodoro García Egea, con dirigentes tan destacados del Gobierno como Elías Bendodo, consejero de Presidencia.

Pablo Casado ha solicitado para sí la confianza que el partido también depositó en Juanma Moreno en 2018. "Yo sé lo que tengo que hacer, y nada ni nadie me va a apartar de ese camino", ha indicado ante el plenario. En su intervención, Juanma Moreno le mostró el apoyo: "Cuenta con nosotros, Pablo, vas a ser el próximo presidente del Gobierno de España". Dirigiéndose a Pablo Casado, ha ensalzado que el líder nacional estéconstruyendo "la alternativa que quieren los españoles para dejar atrás la división, la demagogia y el caos del Gobierno de Pedro Sánchez". "El cambio —ha dicho — que necesita España para volver a la senda del entendimiento y del buen gobierno. Asimismo, ha agradecido que Casado esté siempre cerca de Andalucía". "Eres la esperanza de millones de españoles de tener un presidente serio, honesto y capaz".