Aunque Podemos sea un nuevo partido, la lista de su coalición en Andalucía se va pareciendo a un remake. Ya se lo dijo Julio Anguita a Pablo Iglesias, al oído, la semana pasada en Córdoba: "Pablo, esto es el 77, el 77". En aquel año, el PSOE, un partido minoritario durante la dictadura, adelantó en las urnas al PCE, que fue la formación hegemónica de la izquierda durante el franquismo. Hay, pues, un ajuste de cuentas con el pasado en toda regla. Manuel Monereo, dirigente intelectual del PCE aunque terminó en el escindido y prosoviético PCPE de Ignacio Gallego, encabecerá la lista de Unidad Popular en Córdoba, que posiblemente cerrará de modo simbólico Julio Anguita. Tanto uno como otro fueron los defensores del sorpasso de IU al PSOE en los años noventa, y desde un primer momento han defendido la confluencia de las izquierdas en torno al partido morado.

Aunque Anguita aún no ha contestado a la proposición, el secretario general, Pablo Iglesias, aseguró ayer que "le encantaría" que ocurriera. "Es un clamor en Córdoba", añadió.  Además, el sindicalista jornalero Diego Cañamero ha conseguido colocarse en las listas de Podemos en un  puesto de salida, a pesar de las reticencias mostradas hasta ahora por el número dos de la formación, Íñigo Errejón. Cañamero será el número uno de Jaén y, al confirmarse la noticia, le dedicó esta inclusión a Andrés Bódalo, quien fue el cabeza de lista en las pasadas elecciones y hoy está en prisión por agresiones a un concejal socialista de Jódar. "Si acepto este nombramiento es por la libertad de Bódalo", dijo Cañamero desde Madrid, donde está participando en una huelga de hambre para lograr la salida de la cárcel de su antecesor.

La tesis de Errejón para conseguir hacer de Podemos un partido de masas mediante la transversalidad ideológica ha saltado por los aires, Unidos Podemos es un partido más comunista que antes y no, precisamente, por su alianza con IU, sino por el rescate liderado por Pablo Iglesias de esos nombres históricos de la extrema izquierda. Diego Cañamero, por ejemplo, ha sido un empeño de la líder de Podemos en Andalucía, Teresa Rodríguez. Y Monereo, de Iglesias, a quien definió como "la mejor cabeza" del PCE.

Teresa Rodríguez y el líder de IU, Antonio Maíllo, protagonizaron ayer el primer mitin de Unidos Podemos en Andalucía. En el teatro sevillano Salvador Távora, Teresa Rodríguez agradeció a Maíllo la "generosidad" que ha mostrado IU en la confección de las listas. IU no tiene a ningún cabeza de lista en las provincias andaluzas y la formación en Almería ha terminado por aceptar la inclusión del general Julio Rodríguez en las listas. El mitin se celebró en un teatro que se quedó muy pequeño, unas 300 personas entraron a este edificio y otras 500 se quedaron fuera para ver a "Antonio y Teresa", tal como los presentó el propio dramaturgo Salvador Távora. Al final, ambos debieron salir a la calle. Antonio Maíllo vaticinó que en España habrá "o Gobierno del PP o gobierna Unidos Podemos", mientras que Teresa Rodríguez marcó distancias con PP y PSOE: "De ellos no nos parecemos ni en los andares".

Unidos Podemos parte en Andalucía con unas buenas expectativas de crecimiento. Si ahora cuenta con diez escaños, podrían sumar cuatro más con un leve aumento de la intención de voto. En el resto del país, hay hasta 15 escaños del PP que pueden estar en juego y muy cerca de la coalición, por lo que la suma entre PSOE y Unidos Podemos se puede acercar a la del PP y Ciudadanos. Este es el cálculo de la alianza, aunque saben que hay dirigentes socialistas, como es el caso de la presidenta Susana Díaz, que no aceptará un Gobierno de coalición con los morados. A ello se refirió Rodríguez: "Lo está temiendo un sector de la élite del PSOE, de la que es portavoz Susana Díaz, pero lo que están defendiendo no es al país, sino al propio PSOE, temen por ellos". La líder de Podemos sostuvo que "Susana Díaz se opone al frente anti PP".

Tanto el discurso de Maíllo como el de Rodríguez estuvieron impregnados de una andalucismo de izquierdas. La de Podemos dio el mitin con una bandera blanca y verde que había pertenecido al  parlamentario fallecido José Luis Serrano, partidario de la nación andaluza. Serrano era catedrático de Constitucional en la Universidad de Granada y diputado autonómico cuando falleció hace unos meses a causa de un cáncer.

La intervención de los dos líderes vino precedida de una alocución de  Távora en la que reivindicó el nacionalismo andaluz y, utilizando algunas frases de Blas Infante, al comunismo bien entendido. Rojo, morado y blanco y verde. Quizás por ello, aunque en un plano muy secundario, se vio en el mitin al que fuese uno de los candidatos del PA a la Presidencia de la Junta en el pasado, el ecijano Julián Álvarez.