Los ingresos por impuestos de Hacienda se dispararon en 2022, y buena parte de esta situación se debe al IRPF. España recaudó el año pasado 122.835 millones de euros tan solo con el impuesto sobre la renta de las personas físicas (IRPF), lo que supone un récord desde que se tienen registros comparables (año 1995) y el doble de lo que ingresó por el mismo gravamen en 2005.

Este incremento se ha reflejado en todas las comunidades autónomas, incluido en Andalucía, donde el ingreso bruto por IRPF ascendió a más de 11.269 millones euros, casi un 16% más que en 2021, y un 21,34% más que en 2018, último año que hubo un gobierno socialista en Andalucía, según datos de la Agencia Tributaria.

Exactamente, la delegación de Andalucía ingresó en 2022 11.269.795.000 euros brutos y tuvo que devolver 1.966.423 euros a los contribuyentes, por lo que la recaudación final fue de 9.303.372 euros (ingresos netos).

Sevilla fue la provincia que más dinero percibió por este impuesto el pasado año, en concreto 4.131.721.000 euros (neto), seguida de Málaga con 1.889.898.000 euros. Al otro lado de la tabla se encuentran Huelva, cuyo ingreso neto fue 311 millones de euros; y Jaén, con 351 millones de euros.

El Gobierno atribuye esta alza a las rentas del trabajo, al resultado de la declaración anual de 2021 y el incremento de los beneficios de las empresas unipersonales.

Estas cifras son el resultado de las retenciones que durante todo el año se han estado aplicando a las rentas de los trabajadores de manera mensual y de los pagos a cuentas de los autónomos y autónomas a través de sus modelos 130. Ahora, con la declaración de la la renta de 2022, se realiza el ajuste para todos.

El IRPF es un impuesto estatal, por lo que esta recaudación no se queda en cada comunidad autónoma, sino que el Estado se queda con una parte de estos ingresos y entrega otra parte a las comunidades.

Deflación del IRPF y nuevos tramos en Andalucía

Recibir una porción de esta tarta les da derecho a los gobiernos autonómicos a regular parte de los impuestos vigentes. Andalucía es una de las comunidades que ha hecho uso de sus competencias y, por tanto, regula deducciones propias de aplicación a los contribuyentes que tengan su residencia habitual en este territorio.

En este sentido, la Junta de Andalucía, liderada por Juanma Moreno, sacó adelante el pasado año una reforma fiscal, la sexta del ejecutivo del PP, y posiblemente no será la última. El gobierno andaluz la define como un "revulsivo" con el que busca rebajar la presión sobre las familias y empresas andaluzas, pero con el que también se lanza a la captación de grandes contribuyentes con la eliminación del impuesto de Patrimonio. 

"Las grandes reformas fiscales competen al Estado, pero las comunidades autónomas pueden hacer reformas que influyan positivamente en la economía familiar. A veces, el anuncio de las deducciones en la declaración de la renta son utilizadas más bien como golpe de efecto o publicidad, sobre todo en años electorales", explica la abogada y asesora fiscal Laura Montes, de Lic Itálica.

En lo que respecta a la actual campaña de Declaración de la Renta, los contribuyentes andaluces deben tener en cuenta las últimas modificaciones realizadas que afectan a los tramos del IRPF y a las deducciones.

En un escenario de elevada inflación, muchos hogares cuentan con los mismos ingresos para poder pagar la comida, energía y productos, es decir, han perdido poder adquisitivo. Además, tienen que pagar el mismo porcentaje del IRPF y, en el caso de que el sueldo o la pensión suban, pueden incluso cambiar a un tramo superior y tener que pagar más impuestos mientras siguen viendo que su dinero vale cada vez menos.

Esto puede corregirse, según apuntan algunos expertos, si se cambian los tramos que hacen que los hogares pasen de un tipo a otro cuando sube su nivel de renta. Esto es lo que se conoce como deflactar el IRPF, un mecanismo que busca evitar que el aumento en el pago de este impuesto se coma el incremento real de ingresos. Esta medida, por tanto, pretende ajustar el pago de este gravamen a los niveles de inflación.

Andalucía ha aplicado este mecanismo en sus planes fiscales y ha aprobado que las tarifas se deflacten los tres primeros tramos al 4,4% y que los mínimos personales y familiares se deflacten al 4,3%. Desde Lic Itálica apuntan que "este ajuste que hace la Junta es sólo parcial, ya que actualmente la inflación está al 8%". 

Por otro lado, en la siguiente tabla se puede consultar los cambios realizados recientemente en los tramos del IRPF en Andalucía y cómo le afecta al contribuyente en función de su renta anual, con el correspondiente tipo aplicable en cada caso, y comparar la escala de tarifas andaluza con la estatal.

Nuevas deducciones para los andaluces

El Gobierno de Juanma Moreno también ha aplicado una serie de modificaciones en las deducciones que los contribuyentes andaluces podrán aplicar en la actual campaña de la declaración de la renta, correspondiente al ejercicio 2022 y que debe entregarse antes del 30 de junio.

En este listado hay dos grandes novedades. La primera de ellas es la creación de una deducción del 15% por gastos educativos. En este punto se incluyen "los gastos de enseñanza escolar o extraescolar de idiomas, de informática o ambas, con un máximo de 150 euros anuales por cada descendiente", según se explica en la web de la Agencia Tributaria. "La suma de las bases imponibles general y del ahorro no puede ser superior a 80.000 euros en tributación individual o a 100.000 euros en tributación conjunta".

Otra novedad de este año es la deducción del 10% por donación con finalidad ecológica, con un límite de 150 euros. Se pueden beneficiar de este punto las donaciones realizadas a entidades públicas dependientes de la Comunidad Autónoma de Andalucía o de corporaciones locales de Andalucía y entidades sin fines lucrativos cuya finalidad sea la defensa y conservación del medio ambiente.

También se producen modificaciones en deducciones ya existentes como la que hace referencia a cantidades invertidas en el alquiler de vivienda habitual. Hasta ahora sólo se podían beneficiar los menores de 35 años. A partir de la declaración correspondiente al ejercicio de 2022, se incluyen también a los mayores de 65 años. 

Otro cambio se produce en la deducción para los contribuyentes con discapacidad. Aquí, la cuantía pasa de 100 a 150 euros.

"Todas las deducciones son buenas, pero, en mi opinión, las modificaciones realizadas en Andalucía son insuficientes y nada del otro mundo", reconoce la asesora fiscal Laura Montes, de Lic Itálica. "En el caso de los gastos escolares en idioma e informática, sólo beneficia a familias con hijos que vayan a academias o reciban clases particulares, y, además, su impacto que tiene en la economía familiar es pequeño. Lo que sí tiene de bueno esta medida es que sacas a la luz estos ingresos, es decir, que las familias para deducirse este gasto, tienen que pedir facturas". 

Para esta abogada sevillana sí sería interesante aprobar deducciones por gastos médicos privados, como dentistas, oculistas o fisioterapeutas, como ocurre en Canarias o para personas que llevan a sus animales al veterinario, "lo que permitiría sacar a la luz todos estos ingresos".

Para Montes, se debería fijar más la atención en la revisión de aquellas personas con rentas bajas y que están obligadas a realizar la declaración, donde, en su opinión, a veces, se producen "pagos injustos a Hacienda".