Azul, el color del Alpine de Fernando Alonso

La escudería Alpine, con la que Fernando Alonso regresa a la Fórmula 1 esta temporada, presentó los colores definitivos de su monoplaza, el A521, que pilotará junto al español el francés Esteban Ocon.

El equipo cambia el negro, la decoración provisional exhibida en enero, por el azul, predominante en todo el bólido representando la unión entre la bandera francesa de Renault y la británica, por la sede de la escudería en Enstone. El Alpine A521 es una evolución del RS20 de 2020, por lo que mantiene la mayoría de elementos de ese coche, aunque con piezas desarrolladas y mejoradas, especialmente en la parte trasera por los cambios de reglamento impulsados este año (y cara al próximo) por la FIA.

Alonso fue el gran ausente en la presentación virtual del monoplaza. "Quiero mejorar aún más como piloto. Aprendí mucho de estos dos años fuera de la Fórmula 1 y quiero consolidar esas experiencias y aplicarlas ahora", explicó el asturiano, que se recupera de un accidente que sufrió en Suiza y que le causó problemas en la mandíbula. Alonso ya puede hablar y estará en los entrenamientos programados en Bahréin dentro de diez días.

El ovetense cree que es "un piloto más completo" porque salió de su "zona de confort" y dijo ser consciente de que el nuevo coche es una evolución del de la anterior temporada, algo que asume como "una oportunidad de tener una base para progresar para el futuro". Aunque reconoció que necesitará, al menos, dos carreras para encontrar su mejor nivel, confesó que tiene en su mente algunos grandes premios, como los de España, Francia, Mónaco o Japón.

A sus 39 años, Alonso aseguró que no teme sentirse en desventaja con la ascendente nueva generación: "No corro contra nadie pensando en su edad. Los mismos pilotos que dejé en 2018 en la cima siguen ahí, así que conozco bien a mis rivales", señaló asegurando que siente motivado.