El Betis consiguió derribar al Calavera en el duelo hispalense de la jornada en el Grupo IV. El cuadro verdiblanco continúa con un balance fabuloso –doce triunfos en quince partidos– en la ciudad deportiva Luis del Sol, pero esta vez necesitó del último cuarto de hora para derribar a un Calavera que no se amilanó en ningún momento del envite.

Los muchachos de Pablo del Pino fueron superiores en el arranque. Llevaban el esférico con cierta facilidad a la zona de tres cuartos y empezaron a acercarse a los dominios de Erik. Al Calavera le costaba salir y fruto de ese dominio heliopolitano llegó el primer tanto del encuentro.

Éste llegó en un saque de esquina botado por Diego que Álex remató a la red. No se habían cumplido 25 minutos de encuentro y los de casa ya habían puesto la alfombra sobre la que caminar hacia la victoria. Aunque aminoró el ritmo una vez se puso por delante, el Betis puso incluso ampliar su renta antes del paso por los vestuarios. Pero el Calavera no iba a poner las cosas tan fáciles.

En la reanudación, los visitantes salieron dispuestos a empatar y obligaron a los béticos a guardar la ropa. El ímpetu llevó al equipo blanquinegro a poner en aprietos a Fernando en varias ocasiones. Y finalmente, a falta de 18 minutos para que concluyese el tiempo reglamentario, Lucas reestableció las tablas. Con seriedad y consistencia defensiva, el Calavera había logrado comprometer al cuadro de Del Pino.

Sin embargo, la respuesta bética fue letal. Apenas cinco minutos después de la igualada blanquinegra, Erik volvió a colocar por delante a los suyos tras una asistencia de Ángel Baena. Un golpe anímico del que el Calavera ya no se pudo levantar.

Con este triunfo y la derrota del Sevilla, el Betis se sitúa a seis puntos del liderato. Continúa una unidad por detrás de la segunda plaza, en propiedad del Granada desde la semana pasada. El Calavera, por su parte, sigue en una comprometida duodécima posición.