"Convenio aprobado"

Hoy será un día grande para el Betis. En el apartado económico y, en parte, en el social, superior incluso al de la famosa Junta Extraordinaria del 13 de diciembre de 2010 que sirvió al club para derrocar al consejo del okupa Luis Oliver. Si extrapolásemos la cita de esta mañana al ámbito deportivo, también habría incluso quien le otorgaría similar importancia a la de los éxitos logrados por el grupo que dirige Pepe Mel, que logró hace un año el ascenso de categoría y que lo refrendó hace apenas unas semanas.

Si en no pocas ocasiones se ha escrito que el club ha caminado este tiempo al compás que le marcaba el equipo, que en diversos momentos incluso lo ha sostenido, llegado el día de la celebración de la Junta de Acreedores (hotel Al Andalus, desde las 10:00) es justo constatar que el Betis ha ganado un partido también muy trascendente que se ha prolongado por espacio de 16 meses, justo desde que el 18 de enero de 2010 el nuevo consejo de administración decidiese la entrada oficial en concurso de acreedores como única solución a su deficitaria situación económica.

El propulsor de la medida y uno de los principales artífices de que todo haya llegado a buen puerto es José Antonio Bosch, hoy ya único administrador judicial de la entidad heliopolitana y hombre fuerte en el consejo de administración. Ayer le tocó el turno de explicar la hoja de ruta seguida y a seguir y lo hizo con la satisfacción de haber culminado una ardua tarea.

Lo primero que se le solicita en la previa es un titular y Bosch lo ofrece con vehemencia incluso. "El día antes podemos decir que el convenio está aprobado. Vamos a la Junta con cerca del 56% a esta hora del día y ello quiere decir que mañana vamos a la Junta con el convenio aprobado", fueron sus primeras palabras en Isla Mágica, adonde acudió a un acto promocional de la entidad.

Por supuesto, el administrador no espera sorpresas este miércoles a escasos metros del estadio del Betis, donde se debería desarrollar un cónclave de lo más tranquilo. "Supuestamente, el acreedor puede ir a la Junta y desdecirse, pero entendemos que los acreedores que han ido por las distintas notarías de Sevilla firmando acuerdos no van a llegar mañana cambiando de criterios. Puede haber más periodistas que acreedores", sentenció Bosch.

En la misma línea de optimismo y satisfacción, el también vicepresidente bético comparó este trabajo con un partido. "Aunque aquí no es como en el fútbol, este partido se lleva jugando desde hace un montón de meses y por muchas personas, y ahora se va a ver el resultado del trabajo hecho por un equipo muy numeroso de economistas, juristas y gentes del club con mucho esfuerzo. Si no se firmaba el convenio, era la disolución del Betis. Nos jugábamos muchísimo", comparó.

También habló de la situación con la Agencia Tributaria, la principal acreedora del Betis, tras el acuerdo alcanzado hace unos días. "Nosotros, a día de hoy, le debemos menos a Hacienda que antes, cosa que no pueden decir otros clubes. El Gobierno reconoció que la deuda del fútbol se había incrementado este año en 150 millones de euros, pero nosotros ya le debemos menos dinero, porque estamos pagándole a Hacienda. La finalidad última era conservar los puestos de trabajo y era una obligación de Hacienda y de la administración que nos permitiesen esta situación para poder pagarle", admitió.

La reducción de la deuda, por tanto, es considerable. "Queda pendiente que el convenio con Hacienda se plasme en números. Pero hay 12 millones en procedimientos pendientes de resolución y en el peor de los escenarios la deuda es de unos 52 millones de euros", comentó, al tiempo que explicó quiénes son los acreedores que han dado ya el OK al club: "Fundamentalmente, la deuda ordinaria está compuesta por otras entidades deportivas a las que se les debe dinero por traspasos de jugadores, por propios jugadores y por la Liga. Todo proviene del acuerdo con la AFE, con la LFP y con algún club".

Pudiera parecer que la pujanza de futbolistas como Beñat incluso despejan el panorama económico, pero Bosch no se plantea ese escenario. "No queremos el cuento de la lechera con los jugadores y menos cuando todos los clubes son hoy vendedores. Pensar que nuestros activos se multiplican es pensar como al principio de la crisis de los inmuebles, que todos tenían propiedades tasadas muy altas pero no había compradores. Nuestros cálculos son de que los activos no valen y no vamos a vender jugadores, pero si en un momento determinado entrara algo... Pero en el plan de viabilidad no contamos con ingresos por venta ni a corto ni medio plazo", informó.

También puso de manifiesto la dificultad para obtener dinero por otras vías. "Es muy difícil lograr ingresos extraordinarios. Lo primero que recortan las empresas en tiempos de crisis son los gastos de promoción y cuesta mucho trabajo lograr ingresos. No podemos sacarlos de nuestros socios porque ellos están como el club, en un entorno de un 29% de desemple,o y hay que tener ingenio y buscar nuevos mercados, como es el empeño de nuestro presidente, por ejemplo en China", valoró el jurista.

¿Y los abonos? "Habrá carnés que bajen de precio y ofertas, pero no en todos. Y también un trasvase de abonados de zonas de mayor demanda a otras para poder incorporar más abonados. Ya no subimos los precios el año pasado y no lo haremos ahora, aunque sí nos vamos a plantear subirlos en algunas zonas nobles", avisó Bosch.

El propio Bosch quedará en breve como administrador único del Betis, toda que vez que los tres concursales acaban su labor. "A partir de mañana, el juez y la secretaria toman fe y cesa el trabajo de los administradores concursales, aunque efectivo será cuando el Juzgado homologue los acuerdos de la Junta de mañana. La sociedad sigue en concurso hasta que pague su última deuda, pero los concursales sí se desvinculan ya", apostilló Bosch, quien vive momentos de felicidad y se le nota.