Los administradores judiciales, Rafael Gordillo y Juan Manuel Gómez Porrúa, continuaron ayer con el calendario de reuniones previstas, primero en el estadio, donde dialogaron durante casi dos horas con el presidente, José León, y los consejeros Luis Oliver y Ángel Vergara, y, posteriormente, en la Fundación Heliópolis. Y tanto Gordillo como Gómez Porrúa valoraron positivamente ambos encuentros, sobre todo tras adquirir el compromiso de los consejeros de otorgar el sí a la convocatoria de la Junta General Extraordinaria de accionistas en el consejo de administración del próximo 25 de agosto.

"Hemos reiterado nuestra postura, nuestras pautas de actuación. Queremos transparencia e información, y sobre todo que se cumpla el compromiso de que se celebre la Junta. Si estamos aquí ha sido porque la juez ha puesto en nuestras manos los derechos del 51% de las acciones y lo que justifica la presencia de Oliver en el consejo era haber adquirido ese paquete. Una situación con otra es incompatible. La suma de las acciones será el 100% y no el 150 y nosotros somos ahora garantes de ese paquete. Lo importante es que haya paso firme para que se celebre la Junta General, donde tendrá que salir un nuevo consejo", señaló Gómez Porrúa, que insistió en que Oliver no puede estar en el consejo que se nombre en la junta: "No podemos estar actuando con poder ejecutivo de un mismo paquete. La situación es incompatible con la presencia de personas que quieran estar en un consejo y la justificación sea la titularidad de unas acciones que chocan con otro poder. Lo único que tenemos claro es que el Betis camina hacia un consejo de administracion profesionalizado, que garantice la continuidad de la entidad hasta que se regularice la situación en los juzgados".

Gordillo, por su parte, señaló su punto de vista sobre las decisiones que está tomando Oliver, aunque siempre apuntando que sólo podía hablar de los documentos que le habían enseñado. "Me han enseñado cosas de porcentajes, de fichajes, de lo que se paga. Si esa línea es verdadera y es legal, va bien encaminado, pero le he dicho que no tengo todos los documentos. También les he comentado que sigan haciéndolo bien y que no se encuentren fallos. Si se comete una anormalidad sobre cualquier actuación de fichajes que hagan ellos, conocen las consecuencias. Lo que me ha enseñado está bien, pero no sé si es transparente total", dijo Gordillo, que recordó que él no tiene responsabilidad sobre la materia deportiva: "La responsabilidad es de ellos, mi misión no es ésa. Les he dicho tú haces la operación y cuando esté hecha me das la documentación. La responsabilidad esa no es mía y no me voy a meter. Antes de firmar no voy a entrar".

Anteriormente, Oliver ofreció una conferencia de prensa donde apuntó como positiva la asunción de responsabilidades por parte de Gordillo, además de ratificar su compromiso a la celebración de la Junta General.

"Me quedo gratamente sorprendido de la predisposición de los interventores. Nuestro equipo quería fichar a Gordillo, estamos contentos de que haya venido a colaborar judicialmente, va a ser bueno, nos va a ayudar, va a dar calma. Del consejo del día 25 saldría la convocatoria de la Junta General, estoy convencido. Esto no es una dictadura militar como había antes y cada consejero tiene un voto. Por nuestro parte, Ángel Vergara y yo, representantes de Bitton, vamos a votar que sí. Creo que mis compañeros de junta, también. Bienvenido sea Gordillo al club, ya sea por la juez o por Oliver. Estoy emocionado", dijo el navarro, que fue realista a la hora de valorar la reunión: "No tengo la confianza al 100% de Gordillo, pero es cuestión de tiempo. Está de acuerdo en muchas cosas de las que hemos hecho y sólo nos ha pedido transparencia".