El Lagun Aro GBC no podrá cumplir su sueño de disputar la Eurocup tras el recorte de la subvención de la Diputación Foral de Guipúzcoa y el consiguiente impacto en su presupuesto al dejar de ingresar 700.000 euros, que pone "en riesgo" el futuro del club, según afirmó ayer su presidente, Álvaro Bilbao, en una rueda de prensa en la que estuvo acompañado por sus dos antecesores en el cargo, Gorka Ramoneda y Miguel Santos.

El equipo donostiarra se queda, según su presidente, "sin margen de maniobra" para compensar la disminución económica por parte del gobierno de Bildu, que afectará no sólo a la competición europea, sino también a la ACB.

En esta tesitura, se abre la posibilidad de que la Euroliga, que organiza dicha competición, le dé la vacante de los guipuzcoanos al Cajasol, que terminó séptimo -siete son las plazas españolas en los torneos continentales, pero una de ellas es para el Unicaja, que fue noveno- en la ACB y se quedó fuera.

Cuando concluyó el curso, la entidad hispalense expresó su deseo de participar en la Eurocup recibiendo alguna de las invitaciones de que dispone la organización. No fue así. Pero ahora ha cambiado el panorama, el Cajasol anda más ajustado en su presupuesto y ha hecho las cuentas sin tener en cuenta el gasto extra, entre 150.000 y 200.000 euros, que supone jugar la Eurocup. Total, no sólo ha de ser invitado, el club también debería aceptar una propuesta que quizás llegaría demasiado tarde.