Franz Beckenbauer, posiblemente el mayor mito del fútbol alemán y una de las grandes leyendas de la historia del fútbol, ha muerto a los 78 años de edad, según informó su familia.

Beckenbauer es considerado como la máxima leyenda del fútbol alemán y fue campeón del mundo como jugador en 1974 y como entrenador en 1990 además de haber ganado tres veces la antigua Copa de Europa con el FC Bayern y una Eurocopa con Alemania, en 1972.

En los últimos años había estado retirado de la vida pública por problemas de salud y también por el escándalo desatado por presuntas irregularidades en su trabajo para conseguir para Alemania la sede del Mundial 2006. 

Beckenbauer levanta la Copa del Mundo en 1974, la primera tras la Jules Rimet.

Extraordinario defensa central, de envergadura, visión de juego y una excelsa calidad con la pelota en los pies, de exquisita elegancia, Beckenbauer encarnó la figura del futbolista completo que trascendió con su juego la faceta de su perfil defensivo. Con su fútbol encumbró la figura del líbero.

Asimismo, respondió perfectamente al perfil de futbolista alemán de jerarquía, hasta el punto de liderar aquella selección que fue hegemónica en los años 70, con el título de la Eurocopa en 1972, tras ganar 3-0 a la Unión Soviética en el estadio Heysel de Bruselas, ganar el Mundial de 1974 disputado en su país, al vencer a la Holanda de Cruyff, la otra gran potencia de los años 70.

Cruyff y Beckenbauer, en la final del Mundial de 1974.

También fue subcampeón de la Eurocopa de 1976, que cayó para Checoslovaquia de forma inesperada con el famoso gol de Panenka en la tanda de penaltis tras el 2-2 con que concluyó el partido en Belgrado.

En el Mundial de Italia 90 Beckenbauer hizo aún más grande su leyenda al lograr ser la segunda figura de la historia del fútbol en ganar la Copa del Mundo como entrenador, después de haberlo conseguido como futbolista. Su antecedente fue el recién fallecido Mario Zagallo, que lo logró con Brasil, en 1958 como jugador y en 1970 como seleccionador.

Con Pelé, en la cima del Empire State de Nueva York, en 2015.

Terminó presidiendo el Bayern Múnich al principio de este siglo, después de haber sido su capitán durante el periodo de oro, con los tres títulos de la Copa de Europa entre 1974 y 1976, que siguieron a la Recopa de Europa de 1967 y tuvieron la guinda de la Copa Intercontinental de 1976.

También coronó al Bayern campeón de la Bundesliga como entrenador en 1994 y campeón de la Copa de la UEFA en 1996.

Se va, por tanto, uno de los grandes mitos del fútbol universal, algo más que el líder de una generación de oro del fútbol alemán que trascendió a la cultura popular y al imaginario colectivo como paradigma de futbolista total.