Un Sevilla-Betis y viceversa siempre es especial en la ciudad. De Primera, de filiales, de alevines, de remo... Un derbi levanta pasiones y ahora toca en la Liga Finerwork, una cita a la que ambos conjuntos llegan en condiciones muy desiguales.

El conjunto nervionense, que recibe en el estadio Jesús Navas de la ciudad deportiva (18:15) al cuadro heliopolitano, afronta el duelo con una situación desahogada desde la tranquilidad que le da verse en el séptimo puesto de la clasificación. Con 27 puntos, está once por encima del eterno rival, que anda en plena crisis de resultados y coqueteando con el descenso desde hace tiempo. La mala racha ya le costó el puesto a Francis Díaz tras encadenar siete partidos sin ganar con seis derrotas, lo que le ha metido en la lucha por la salvación de lleno. Con un punto por encima del descenso, el Betis llega muy necesitado y sin la revolución esperada tras la llegada del sevillano Gerardo García al banquillo, pues en los dos partidos que lleva apenas ha logrado dos empates.

El técnico no podrá contar con Paulita, sancionada por acumulación de tarjetas, ni con Valle, lesionada.

El Sevilla, por su parte, llega al choque tras empatar en tierras catalanas ante el Levante las Planas (1-1) y perder en su último partido en casa (2-4) frente al Levante. Antes, sin embargo, el conjunto de Cristian Toro sumó 13 de 15 puntos que lo catapultaron en la clasificación. Con la delantera Martín-Prieto en plena vena goleadora –suma nueve tantos en lo que va de temporada–, el Betis afronta un exigente test para evaluar una defensa que no viene aportando mucha seguridad. Así se le han escapado puntos en los últimos minutos en varios partidos que han ido minando la confianza del grupo.

En la primera vuelta las verdiblancas se impusieron por 3-0, pero el Sevilla se llevó el derbi en su campo la pasad campaña y tendrá ganas de hundir un poco más al eterno rival en un duelo entre la necesidad de unas y las ganas de vendetta de otras.