Otro millón de euros más para Chevantón

Ernesto Javier Chevantón posiblemente sea el futbolista que más dinero ha ganado en el Sevilla en los últimos años y -sin el posiblemente- el que menos rendimiento en relación coste de la inversión-aportación al equipo ha ofrecido.

Y cuando se creía que el uruguayo era historia en el club nervionense desde el pasado mes de agosto, cuando el Sevilla anunció la rescisión de su contrato, el final de su relación con la entidad no se ha producido hasta el pasado jueves, día 25 de noviembre, cuando los abogados del club y los de Chevantón llegaron a un acuerdo amistoso cifrado en algo más de un millón de euros por la demanda por despido improcedente que el jugador había tramitado contra el Sevilla -donde llegó a decir que jugaría "gratis"- y por el que le reclamaba más de dos millones de euros, la cuantía de la ficha de la temporada actual, la última de las que firmó cuando fichó en 2006.

El Sevilla, según ha podido saber este diario, reconoció la improcedencia del despido en la vista celebrada el pasado jueves en el CMAC (Centro de Mediación, Arbitraje y Conciliación) de la Consejería de Empleo de la Junta de Andalucía, comprometiéndose a abonar en la cuenta de Chevantón 1.005.000 euros antes del 15 de septiembre de 2011. Esta cantidad viene a ser la mitad del sueldo anual en concepto de ficha del futbolista, que cobraba en el Sevilla unos 2,1 millones de euros por temporada.

Según el acta de conciliación, ambas partes acordaron como fecha de cese de la relación laboral el 19 de agosto de 2010, tres días antes de que el Sevilla anunciara públicamente la rescisión del contrato con el uruguayo, que se marchaba al Lecce italiano, así como la desvinculación de Lolo, que firmaría después por Osasuna.

Precisamente la pasada semana fue noticia Chevantón en Italia al ser sancionado con cinco partidos de suspensión por el incidente que protagonizó en el partido Lecce-Sampdoria, en el que, tras ser expulsado por una dura entrada a Guido Marilungo, insultó al árbitro y le tiró la camiseta a la cara.

Sin duda, Chevantón ha cumplido una historia muy triste en el Sevilla, club al que sólo le dio una alegría, un gol muy importante en Donetsk -el de la victoria- que le daba sentido al ya famosísimo de Palop de cabeza que forzaba la prórroga ante el Shakhtar. A cambio, el uruguayo, primas aparte, se ha embolsado unos 8 millones de euros de las arcas del Sevilla, en el que permaneció desde 2006 exceptuando media temporada en el Atalanta, hasta el pasado agosto. Ahora sí que ya es el final, aunque a costa de otro millón más.